El fanatismo pudo más y esta periodista no quiso perderse el concierto que ofrecía Alejandro Sanz en Perú. Solicitó el permiso respectivo a sus jefes, pero ellos no compartían el mismo fanatismo así que se lo negaron ¡Estos jefes! ¡Nunca entienden a sus empleados! La periodista no se hizo problemas y renunció a su trabajo. ¡¡Un gran ejemplo de coraje!!
Comentarios
Mientras que algunos queremos que deje de cantar http://www.petitiononline.com/nomasale/
Mi heroína.
Si su contrato fuera una basura como las de por aquí, lo vería normal...