El misterio del tesoro hallado en un tren de París Aunque en un principio se creyó que eran 20 lingotes de oro parece que se trata de otro material, aún no identificado.
Una vez mi abuelo mandó a mi padre que hiciera de chófer de una tía-abuela muy beata que teníamos, y que se le llevara a Lourdes. Pararon en un hotel a mitad camino, a hacer noche. Bajaron, desayunaron e hicieron camino. Al llegar al destino, cuenta mi padre, que se metieron en una misa. A la hora del cepillo, mi tía abuela la beata, metió la mano en el bolso para buscar monedas y al sacarala empezó a gitar "Milacre!! MIlacre!!" (milagro, en vernáculo) porque toda la mano estaba cubierta de oro.
Era mantequilla del desayuno. Una de esas pastillas envueltas en papel que, al no acabarse, se había dejado para luego...
Tiene pinta de tratarse de un vulgar timo... con mucho dinero por medio pero un timo.
A alguien (llamémole "pardillo") le venden (llamémosles "timadores") un maletín con supuesto oro extraído ilegalmente (por eso no lleva cuños) a un precio ventajoso.
El pardillo espera poder hacer efectivo ese supuesto oro revendiéndolo o refundiéndolo al amparo de algún negocio de esos de "Compro Oro" y lo lleva a París.
Como esos lingotes pesan lo suyo, al llega a la estación deja la maleta (recordemos que el pardillo es un poco "pardillo") y va en busca de un carrito para transportarla más cómodamente... pero al volver de vuelta se encuentra que el revisor está avisando a la policía y le entra miedo, ya que sabe que el (supuesto) oro es de procedencia ilegal y ante la perspectiva de acabar entre rejas y teniendo que dar muchas respuestas, se larga rumiando su desgracia.
Mientras tanto los timadores estarán tan felices disfrutando del dinero del pardillo.
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Una vez mi abuelo mandó a mi padre que hiciera de chófer de una tía-abuela muy beata que teníamos, y que se le llevara a Lourdes. Pararon en un hotel a mitad camino, a hacer noche. Bajaron, desayunaron e hicieron camino. Al llegar al destino, cuenta mi padre, que se metieron en una misa. A la hora del cepillo, mi tía abuela la beata, metió la mano en el bolso para buscar monedas y al sacarala empezó a gitar "Milacre!! MIlacre!!" (milagro, en vernáculo) porque toda la mano estaba cubierta de oro.
Era mantequilla del desayuno. Una de esas pastillas envueltas en papel que, al no acabarse, se había dejado para luego...
Al final el oro no es oro, sino hecho de otro material. Cuanto delincuente despistado
Tiene pinta de tratarse de un vulgar timo... con mucho dinero por medio pero un timo.
A alguien (llamémole "pardillo") le venden (llamémosles "timadores") un maletín con supuesto oro extraído ilegalmente (por eso no lleva cuños) a un precio ventajoso.
El pardillo espera poder hacer efectivo ese supuesto oro revendiéndolo o refundiéndolo al amparo de algún negocio de esos de "Compro Oro" y lo lleva a París.
Como esos lingotes pesan lo suyo, al llega a la estación deja la maleta (recordemos que el pardillo es un poco "pardillo") y va en busca de un carrito para transportarla más cómodamente... pero al volver de vuelta se encuentra que el revisor está avisando a la policía y le entra miedo, ya que sabe que el (supuesto) oro es de procedencia ilegal y ante la perspectiva de acabar entre rejas y teniendo que dar muchas respuestas, se larga rumiando su desgracia.
Mientras tanto los timadores estarán tan felices disfrutando del dinero del pardillo.
Cómo le gustan a Pedrojota las historias de fantasía sobre encontrarse cosas misteriosas en trenes.
Walter Bishop sigue tan despistado como siempre, dejandose maletines en el tren con sus experimentos
Seguro que lo iban a utilizar para fundirlo y hacer anillos
http://www.losviajeros.com/foros.php?p=942441
Que historia más emocionante!