17 de enero de 1966, 10:22 de la mañana. Cielo azul y soleado sobre la pequeña localidad almeriense de Palomares. Fuertes ráfagas de viento y mar embravecido: 18 grados. Los estudiantes ya están frente a sus pupitres, los agricultores en los campos, los pescadores atentos a las redes. A 9.300 metros de altura, un bombardero B-52G estadounidense que regresa a su base en Carolina del Sur, e intenta repostar en vuelo a 400 kilómetros por hora, choca con su avión nodriza. Siete hombres mueren y caen sobre Palomares cuatro bombas termonucleares
Comentarios
El accidente nuclear no deja de ser un tema menor, lo realmente estremecedor fue tener que ver al Fraga chapoteando en gayumbos...
Como se suele decir, no hay mal que por bien no venga.
#0 Dupe Los secretos de Palomares, medio siglo después
Los secretos de Palomares, medio siglo después
pressdigital.es¿España potencia nuclear? Ja.
España tenía las bases de USA prque estaba a la distancia correcta para servir de plataforma en los vuelos preventivos de la Fuerza Aerea Useña frente a la URSS. Estaba lo suficientemente lejos para que en caso de alerta les diese tiempo a despegar. Todo lo demás son imaginaciones e intenciones sin fundamento. USA no permitiría en ningún momento que España tuviese la bomba atómica.
#5 Tampoco permitió que la tuviesen Israel o Pakistán.
Pues yo he leído todo lo contrario en otros artículos y que España había recogido información muy sensible de las bombas de palomares que fueron claves para que el proyecto islero fuera viable
"Paco el de la bomba". Muy bueno el mote.
#4 En los pueblos semos asín