Una antigua cápsula soviética que lleva décadas inactiva ha reentrado en algún lugar de nuestro planeta. El objetivo, de aproximadamente un metro de diámetro, forma ovoidal y 495 kg de peso, llevaba unas insignias metálicas con la efigie de Lenin, el escudo de la Unión Soviética y el nombre «Venera 9» grabado en ellas. Curioso, ¿no? Pero, un momento, ¿cómo es esto posible? Al fin y al cabo, la ‘verdadera’ cápsula de la sonda Venera 9 aterrizó en Venus el 22 de octubre de 1975. ¿Qué misterio es este?