Aquellos que sostienen un discurso frentista de conmigo o contra mí son, por regla general, individuos sin ética ni empatía que no ven personas sino carne de cañón que utilizar para sus fines. Tomemos por ejemplo este artículo de @Togliatti que, acorde a esta imagen que he usado en otras ocasiones, pertenece al segundo ejemplo: El frentista es, en este caso, un marxista …