Dormir bien es la asignatura pendiente de multitudes. Hay varios motivos para dormir demasiado, como la depresión o el cansancio acumulado, pero muchos más motivos para no dormir. Se puede no dormir por culpa de la casa o por la falta de hogar, por falta también de amor o por relaciones tóxicas, por las facturas, por el trabajo o su ausencia, por culpa de tu jefe o por culpa de que eres tu propio jefe.