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#6:
Hola aquí un padre que teletrabaja y va a la compra, hace la comida, la cena los baña etc, mano a mano mi mujer y yo.. Menos en el tema de la compra que siempre voy yo...
No he pasado del primera párrafo para ver qué, o es mentira y está escrito por alguien que no tiene niños, o esa madre es patética.
En los tres escasos minutos que ha tardado en encenderse mi ordenador portátil, he tenido que levantarme ante la caída de una lámpara que había en la mesita y a quitar de las manos de la niña el cristal de un marco de fotos que amenazaba con hacerse añicos por todo el suelo del salón. Lo primero que hacen unos padres normales con un niño en casa es, quitar del alcance del menor todo lo que se pueda caer y más aún si es de cristal... es de primaria de padres.. y ahí dejé de leer, a tomar el pelo a otro.
No he pasado del primera párrafo para ver qué, o es mentira y está escrito por alguien que no tiene niños, o esa madre es patética.
En los tres escasos minutos que ha tardado en encenderse mi ordenador portátil, he tenido que levantarme ante la caída de una lámpara que había en la mesita y a quitar de las manos de la niña el cristal de un marco de fotos que amenazaba con hacerse añicos por todo el suelo del salón. Lo primero que hacen unos padres normales con un niño en casa es, quitar del alcance del menor todo lo que se pueda caer y más aún si es de cristal... es de primaria de padres.. y ahí dejé de leer, a tomar el pelo a otro.
#5:
#3 He leído el artículo y pienso que está mal planteado precisamente por eso.
La autora describe su caso personal e intransferible, que es el caso de una madre con su hija. Hasta ahí perfecto. El problema es que a la hora de considerar su experiencia como caso particular de un problema general, el problema general acaba siendo de las "madres de España", lo cual resulta bastante sexista.
No entiendo bien cuál es la forma de pensar que tienen algunas personas (como la autora del artículo) para que resulte aceptable ese tipo de generalizaciones que se quedan al 50%.
La autora describe su caso personal e intransferible, que es el caso de una madre con su hija. Hasta ahí perfecto. El problema es que a la hora de considerar su experiencia como caso particular de un problema general, el problema general acaba siendo de las "madres de España", lo cual resulta bastante sexista.
No entiendo bien cuál es la forma de pensar que tienen algunas personas (como la autora del artículo) para que resulte aceptable ese tipo de generalizaciones que se quedan al 50%.
Comentarios
Hola aquí un padre que teletrabaja y va a la compra, hace la comida, la cena los baña etc, mano a mano mi mujer y yo.. Menos en el tema de la compra que siempre voy yo...
No he pasado del primera párrafo para ver qué, o es mentira y está escrito por alguien que no tiene niños, o esa madre es patética.
En los tres escasos minutos que ha tardado en encenderse mi ordenador portátil, he tenido que levantarme ante la caída de una lámpara que había en la mesita y a quitar de las manos de la niña el cristal de un marco de fotos que amenazaba con hacerse añicos por todo el suelo del salón. Lo primero que hacen unos padres normales con un niño en casa es, quitar del alcance del menor todo lo que se pueda caer y más aún si es de cristal... es de primaria de padres.. y ahí dejé de leer, a tomar el pelo a otro.
#6 +1000000
Habrá que ver la educación que da a sus salvajes para que estén así. Yo tengo 2, y no tengo que estar quitándoles un marco que vayan a tirar al suelo (porque les he educado para que no cojan cosas y las tiren al suelo), no tengo cosas de cristal en su habitación (perogrullo), y mi mujer no tiene que hacer admás toda la casa porque los 2 colaboramos al 50%.
#18 Asói de simple, aplicar un poco de sentido común, anda mi niño pequeño que no tiene cuidado con nada, qué hago, vamos a poner todo lo rompible y peligroso a su altura.... apuesto por articulo fálso.
#18 ¿Los tienes en una habitación sin ventanas? E iras de buen padre...
#6 te has perdido el siguiente párrafo: la niña saltando en el sofá y la madre llena de nerviosismo.
Yo tengo dos hijos. Ninguno Salta en el sofá como si estuviese poseído.
Es cuestión de educarles bien.
En fin, un artículo lamentable.
Por cierto, aquí otro padre que compra, cambia pañales, friega, plancha, cocina, limpia, pero también arreglar cosas, monta muebles, pinta paredes, configura los ordenadores, pone límites, cura heridas, tranquiliza a los niños, va al colegio, etc etc.
#19 Me uno a vuestro club. Y ni mi señora esposa ni yo estamos en los grupos de wasap porque no aguantamos las memeces que se escriben ahí.
#19 Ya te digo, puede que no se suban con toda la delicadeza que deberían, o que los pies más de una vez no estén en si sitio, pero de ahí a ponerse a saltar... Apesta a artículo inventado lleno de topicazos, ademas de inventado por alguien que no tiene hijos.
#19 Yo cada vez tengo más claro que un niño necesita dos figuras paternas, no entro a valorar en si tienen que ser hombre-mujer, mujer-mujer, hombre-hombre, me da igual. Pero creo que si solo les cuida/educa una persona es más probable que tengan “vicios” de educación, y no así si le cuidaran dos figuras, ya que es más probable que lo que una les permitiría la otra no lo haga, que una tienda a consentir o mimar más que la otra, que cuando una esté agotada y tenga la inercia de dejar hacer la otra tenga ganas de enfrentarse al niño, etc, etc.
#28 dos son pocas.
Necesita un monton de adultos de los que tomar referencias, para sentirse querido y atendido, etc, ..
Padres, tíos, abuelos, amigos de los padres, profesores, maestros, hermanos mayores.....
#29 Ya bueno, pero mientras esté en casa la mayor parte del tiempo estará con los padres, dos mejor que uno.
#30 eso está claro.
Conozco a un par de madres divorciadas con la custodia que se tiran de los pelos.
Pero bueno, se divorciaron porque el marido pasaba de todo.
Un adulto solo con los niños tanto tiempo es matador.
#3 He leído el artículo y pienso que está mal planteado precisamente por eso.
La autora describe su caso personal e intransferible, que es el caso de una madre con su hija. Hasta ahí perfecto. El problema es que a la hora de considerar su experiencia como caso particular de un problema general, el problema general acaba siendo de las "madres de España", lo cual resulta bastante sexista.
No entiendo bien cuál es la forma de pensar que tienen algunas personas (como la autora del artículo) para que resulte aceptable ese tipo de generalizaciones que se quedan al 50%.
#7 Personalmente paso más tiempo con nuestra peque, por horarios, etc. (Pre-confinamiento). No tiene absolutamente nada que ver el cuidado de un hijo con el tiempo malgastado en esos grupos de mierda. Es como una reunión de vecinos gilipollas interminable. Churras con Marinas.
Otro artículo lacrimógeno donde la mujer es la pobre víctima. Me recuerda cuando la Clinton dijo que las mujeres eran las víctimas más sufridas y desgraciadas de las guerras.
Hay que exponer los problemas de la gente (no solo las mujeres) y encontrar soluciones, pero con artículos lacrimógenos como éste, paso.
Título alternativo: "Teletrabajo lacrimógeno".
Incorrecto, el artículo sólo habla de madres. Como si los padres estuviésemos cazando en el bosque...
#1 ¿cuantos padres (masculino) hay en el grupo de whatsapp de las clases de tus hijos?
#2 Esa es una buena pregunta. Vamos a suponer por un momento que hay mayoría de madres en esos grupos de whatsapp. ¿Justificaría esa mayoría que alguien pensara que "cuidar de los niños es tarea de las madres"? ¿Hay que esperar a que la proporción sea 50% / 50% para que se pueda empezar a hablar también de los padres, o cómo va esto?
#7 El artículo es sobre madres y sí la gran mayoría es trabajo de las madres, lo que hay que esperar es a que sea 50/50, mientras la mayoría seran las madres... apuntaros.
#8 Si el cuidado de un hijo se mide por decir estupideces en un grupo de WhatsApp, a mi ya me explota la puta cabeza...
#12 Es que el patetismo no conoce límites.
#8 ¿Por qué eres tan mentirosa?
#14 Creo que es feminista, va con el cargo.
#14 Por qué eres tan...andalú.
#2 desde cuando estar en un grupo de whatsapp es equivalente de cuidar a tus hijos?
#9 Es el cuidar-postureo. Igual que las tonterías de facebook/twitter de madres, cuanta más el tiempo que digas que cuidas de ellos que lo que cuides en realidad de ellos. Te pongo un ejemplo, mi hermana no para de decir chorradas en facebook sobre el cuidado de sus hijos y bla bla, lo curioso es que siempre se le olvida mencionar que es la abuela la que cuida más de ellos por las tardes o cuando salen de copas y cenas. Yo que vivo fuera y no tenemos abuelos aqui, parecería que lo los cuidamos (no lo publicamos), cuando en realidad estamos todo el día y limitadísimos por cuidar de los hijos.
#2 Mi pareja está en uno de esos. Y antes de que empezara el cole, ya le dije que no quería saber nada de esa mierda. Acerté de pleno. La sociedad, en general, se ha ido a la mierda pero muy fuerte.
#2 ¿Grupos de Whatsapp de qué? Perdona pero los grupos de Whatsapp no son ninguna vía de comunicación entre los profesores y los padres, por lo que estar en ellos solo sirve para cotilleos, cumpleaños y GILIPOLLECES. Me niego a estar como padre en ninguno de ella, mi mujer no, pero solo me da la razón.
#13 Mi mujer está en un grupo de whatsapp parecido (yo no, ni de coña) y ha tenido que meter bronca más de una vez porque los temas se desvian del propósito del grupo.
#2 NUNCA
#1 Corregido. Tienes razón, el relato sólo habla de madres
#1 Estás pecando de evidencia insuficiente, un tipo de falacia. Concretamente no estás teniendo en cuenta que los padres son hombres a diferencia de las madres que son mujeres. Los hombres gozan de los privilegios heteropatriarcales, a diferencia de las mujeres que sufren la desigualdad provocada por la opresión machista.
Sé que lo que he dicho no significa nada, pero así es como te van a justificar el que hay que hacer algo por las mujeres y sólo por las mujeres: con nada, con palabrería vacía y frases ocultistas con la palabra "estructural" en medio.
Esto de hablar sin decir nada ha existido siempre, de mucho antes del feminismo de los privilegios. Hay quienes confunden el hablar con el decir cosas, cuando no tiene nada que ver.