En diciembre de 2014, con Antoni Domènech, publicamos un avance de financiación (Arcarons, Domènech, Raventós y Torrens, 2014) de una renta básica (RB) mediante una reforma del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) que motivó muchas reacciones. Hubo algunas críticas buenas y muchas más de mediocres y malas. Pasados casi dos años, hemos dispuesto de nuevos materiales y hemos ajustado y perfeccionado aquel avance de proyecto de financiación, aprovechando las buenas críticas.
Comentarios
Buen envío, en camino del abismo, gracias a la pequeña gran mafia de inútiles que pupula en Menéame.
Todo lo que se hable de la RBU, la RB o similares es interesante porque es el camino y es necesario.
La idea es de cajón: Mejoraría el salario de todo el mundo, mejoraría la relación de fuerzas entre la empresa y el trabajador, echaría abajo todas las empresas improductivas que sobreviven como parásitos del trabajo basura, redirigiraría más trabajo a actividades de voluntariado, etc.
Gracias por el enlace.
Los de sinpermiso me la traen sincuidado.
Me gustaría que las personas que votan negativo dieran sus razones. Probablemente no se han leído el artículo. Yo siempre he sido muy escéptico respecto a la Renta Básica, pero con este artículo me han convencido. Dan cifras reales para su financiación, y contestan a las críticas que se suelen hacer a la Renta Básica.
Supongo que el gran problema para muchas personas será que la renta básica actúa como un potente sistema de distribución de la riqueza y "es una formidable palanca para la emancipación en muchas dimensiones: de los jóvenes, de las mujeres dependientes, de los emprendedores, actúa de caja de resistencia e incrementa la capacidad de negarse a aceptar cualquier trabajo precario, y elimina las exclusiones financieras y a la vivienda, entre otras".