Tendrá la culpa el euribor, que en agosto tocó la casi demoníaca cifra del 4,666% después de 23 meses de escalada alcista. Tendrá la culpa la crisis de las hipotecas basura con la que los bancos estadounidenses infectaron a la economía mundial a partir de ese mes. La tendrán los precios que mantienen las compañías para los accesos a Internet y el mileurismo que afecta a una parte de la juventud española. O a lo mejor es que a la mayoría de los españoles no les interesa Internet.
|
etiquetas: internet , techo