Entrevista del año 1993 al dibujante de cómics Jean Giraud, conocido por su pseudónimo "Moebius". Comenzó su carrera en la revista Pilote como dibujante del cómic "Teniente Blueberry", del género Western, y su carrera derivó hacia el cómic fantástico con obras como "El garaje hermético" y "El Incal"
Comentarios
Tengo el honor de haberme tomado un café (y charlar con él) en Las Ramblas de Barcelona con el maestro, hablaba muy bien castellano. Un tipo ad-mi-ra-ble. Sin matices.
#5
#10 Amplio la cosa si quieres... ni se me ocurrió que me firmara un original o que me hiciera un dibujo, que lo habría hecho, casi seguro, pero ni se me pasó por la cabeza... Nos pusimos a hablar de cómic, de política, de editores... de... y se nos fue pasando el rato... Por aquellos años, me dedicaba al mundo del cómic como aporreateclas y conectamos... bueno, él era entrañablemente amistoso y además nada divo, todo lo contrario, un tipo normal y sencillo (cosa que en ese mundillo y en aquellos años no era normal, aun recuerdo mi "encuentro" con Pepe Moreno venido de EEUU y... bueno, nada que ver)... Qué más recuerdo... pues que estuvimos charlando sobre lo divino y lo humano. Un tipo adorable, supermodesto y supercreativo. Una de las mejores horas empleadas en mi vida. Hora y media quizás.
#5 Cuenta más. ¿ “Edena”, “Arzak”? Dios, el “Arzak”... #11 Iba a escribir un comentario largo pero lo único que puedo decir es: ¡Cabron, que suerte y que envidia me das!
#14 Bueno, fue de esos encuentros casuales de estar justo pasando al lado de él mientras paseaba por Ramblas... se celebraba un Salón de Cómic de aquellos años... Yo andaba invitado al trabajar en el mundillo en aquella época. Lo vi y lo saludé intentando hablar lo mejor posible mi francés (con acento del sur de Francia, poco parisino, claro) y él me devolvió una sonrisa y en castellano con giros méxicanos y algún pequeño deje mexicano me respondió, le dije de tomar un café y nos sentamos por allí cuando Ramblas era otra cosa, no como es hoy día... se interesó por mi trabajo y por supuesto yo le hable de su calidad como gran artista... Si mi memoria no me traiciona y no me lo invento todo con el paso del tiempo... creo que dijo que era un trabajo muy bonito pero muy duro, horas y horas delante del tablero y que en Francia le trataban de maravilla... Que Blueberry era un trabajo enorme y que quizás por eso se pasó a esa "línea clara" tan Moebius... Recuerdo que el primer año que fui invitado al festival de cómic de Angoulême, volvimos a vernos... él rodeado de docenas de aficionados y siempre con una sonrisa firmando autógrafos (cuando no se cobraba por ello, claro)... levanté torpemente la mano para saludarlo y me reconoció, se levantó y me devolvió el saludo. Pero andaba tan liado que ya no pudimos hablar más... y se lo llevaban en volandas los jefazos franceses, belgas, ingleses de las editoriales...
En fin, de la tranquila charla con él... no sé si saqué mucho en claro, pero notabas que transmitía paz y tranquilidad, y que hacía de vez en cuando algún chiste picante... nada absurdo... y su sonrisa... la sonrisa Moebius. No sé qué contarte y no sé si mis recuerdos están falseados por el paso del tiempo.
#15 Bueno, te has echado un café con uno de los grandes genios del cómic, no es poco.
¡Qué artista tan increíble! En los 80 era, sencillamente, un dios.
El puto amo de los genios del cómic fantástico.
#2 Y Enki Bilal, otro puto amo
''El Incal'' me pareció una auténtica maravilla futurista y psicodélica.
#3 Escrita por Alejandro Jodorowsky.
Un fan suyo en los ochenta, noventa, quiero recordar, pero sus dibujos y personajes casi se me han desvanecido de la memoria. Sus cómics eran de los más caros en compra pero su visión y lectura te trasladaban a mundos fantásticos, valía la pena el esfuerzo.
#6 ¿Sabías que casi siempre tenía un pequeño ritual diario? Salía a comprar la verdura (sobre todo verduras) y la comida del día... cada día en su barrio de París... y tras la compra se ponía a dibujar... paraba a la hora de preparar la comida, comía tranquila y normalmente y después de comer seguía dibujando... luego a media tarde (en París) salía a tomar un café a un bareto parisino de su barrio y continuaba dibujando después hasta... hasta que se iba a dormir, había días que era muy tarde y había muchos días que hacía horario normal de dormir a horas normales. Era un tipo que todo el mundo quería en su barrio. Era una persona de su barrio.
#12 me entere de su muerte por meneame corría el 2012 sin duda un triste da.
#13 Sí, me dolió que se fuera uno de esos autores que mezclan sencillez humana y calidad artística.
Me encanta
Rabiosa actualidad