La cabeza del cuervo, también considerada anglosajona y datada del siglo VII, incluía un impresionante ojo de granate y diminutas esferas de oro que delimitaban las "plumas" salpicadas de granate. Phillips estimó que pesaba alrededor de 57 gramos.
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Igual lo que haría falta es un poco de educación al respecto, sobre que hacer cuando detectan una señal, quizás tener una cámara corporal acoplada, y si lo que encuentran tiene la mas mínima posibilidad de ser un hallazgo arqueológico , tener claro que deben parar inmediatamente y avisar a las autoridades.
Por el lado bueno, si han encontrado esas piezas, le han dado a los arqueólogos un lugar especifico para hacer una prospección rigurosa.
Naaah hombre, prohibido y sigan.