Para vivir más hay que bajarle duro a las calorías. En organismos que van desde levaduras hasta primates, dietas a base de la llamada restricción calórica alargan la vida hasta en una tercera parte. Los científicos han sabido esto desde hace décadas, pero sin saber por qué. Ahora, un estudio publicado en la revista Cell arroja luz sobre el tema y abre la puerta a una idea sensacional: tener los beneficios de la restricción calórica (vivir más, aplazar los achaques de la vejez) pero sin tener que sufrir las férreas dietas necesarias para que ...
Comentarios
Así viviremos más años para poder pagar la hipoteca.
No he entendido nada, pero voto todo lo que retrase la vejez.
Ya estamos intentando colar droga rebajada con harina...
¿Qué tal si todos tenemos una dieta de restricción calórica? Además de vivir más, tendríamos más recursos.