Totalmente cierto. Cuando podían asesinar a los homosexuales quemándolos vivos con hinojo, para que el suplicio durase más, lo hacían. Cuando los ilustrados no les dejaron cambiaron de estrategia y los denunciaban a la policía para que fuesen encarcelados. Cuando, hace unos pocos años, tampoco pudieron hacer esto cambiaron y se dedicaron a hacer manifestaciones contra la igualdad y a votar en la ONU en contra de cualquier denuncia por homofobia (junto a los países integristas islámicos) y a favor de mantener la pena de muerte.
Cambian constantemente para aferrarse a un poder que también cambia para mantener sus privilegios.
De eso se hablará en la siguiente entrada, aunque centrándome en los frentes de debate que tiene abiertos ahora (lo de los homosexuales no es uno de esos frentes, tienen trabajo atrasado de décadas para llegar hasta ahí)
Controlan mentalmente a una gran parte de la población, tienen mucho poder y cogidos por los huevos a muchos gobiernos, por tanto pueden manejar las situaciones a su antojo. Quiero creer que esta pantomima algún día, y en alguna generación, acabará.
A su antojo no: de eso se trata. Si algo han aprendido los obispos es a nadar y guardar la ropa, porque nunca se sabe de donde soplará mañana el viento.
Comentarios
Totalmente cierto. Cuando podían asesinar a los homosexuales quemándolos vivos con hinojo, para que el suplicio durase más, lo hacían. Cuando los ilustrados no les dejaron cambiaron de estrategia y los denunciaban a la policía para que fuesen encarcelados. Cuando, hace unos pocos años, tampoco pudieron hacer esto cambiaron y se dedicaron a hacer manifestaciones contra la igualdad y a votar en la ONU en contra de cualquier denuncia por homofobia (junto a los países integristas islámicos) y a favor de mantener la pena de muerte.
Cambian constantemente para aferrarse a un poder que también cambia para mantener sus privilegios.
#1 Bravo!!!
De eso se hablará en la siguiente entrada, aunque centrándome en los frentes de debate que tiene abiertos ahora (lo de los homosexuales no es uno de esos frentes, tienen trabajo atrasado de décadas para llegar hasta ahí)
Controlan mentalmente a una gran parte de la población, tienen mucho poder y cogidos por los huevos a muchos gobiernos, por tanto pueden manejar las situaciones a su antojo. Quiero creer que esta pantomima algún día, y en alguna generación, acabará.
A su antojo no: de eso se trata. Si algo han aprendido los obispos es a nadar y guardar la ropa, porque nunca se sabe de donde soplará mañana el viento.
La iglesia es conservadora, sobre todo del poder. Si para conservar el poder hay que cambiar, se cambia. Pero lo mas tarde posible.