El aire acondicionado es uno de esos lujos convertidos en auténtica necesidad. La tecnología del aire acondicionado ha hecho habitables lugares que nunca lo habían sido, pero también los ha hecho dependientes de un enorme consumo energético. Esta tecnología, que apareció comercialmente a mediados del siglo pasado, parece haber relajado la ambición de los arquitectos, que ya no tienen que preocuparse por el comportamiento térmico de un edificio: basta poner un acondicionador de aire y ya está todo solucionado. Pero, ¿siempre ha sido así?
Comentarios
Yo vivo en Alicante. Aquí el calor pega bien fuerte.
A día de hoy, no he puesto aire acondicionado en mi casa. Puede pasarse mal algún día de calor extremo, pero nada del otro mundo.
Una mojadita de cabeza y ventilador bastan para refrescarte.
La casa abierta para que circule el aire.
Balcón nocturno etc.
Me saca de quicio esa obsesión por el AA.
Son unos pocos días de calor y el ahorro es considerable.
#7 Pues macho, de verdad te envidio. Cuando yo vivía en Elche, eso era auténticamente insoportable. Encendía el ventilador a mediados de junio y lo apagaba a mediados de septiembre. Me acuerdo que cuando pusieron una sala de estudio al lado de mi casa, me fundía las asignaturas en la mitad del tiempo planeado, porque allí había aire acondicionado y no quería ir a casa
Si pega el sol en casa, como era mi caso, te aseguro que es muy insoportable el bochorno dentro.
#7 Supongo que tendrás la suerte de tener una casa muy bien situada, a la que nunca le da el sol o algo así, porque te mojas la cabeza y te refresca, si, durante un minuto, y el ventilador no sirve si el aire esta caliente, por lo que tampoco sirve tener las ventanas y el balcón abiertos.
Por las noches el aire es imprescindible si quieres dormir decentemente, no es obsesión, es una necesidad.
#9 Ese es el problema, que la gente lo ve imprescindible cuando no lo es.
Imprescindibles hay mucha cosas y esa no es una.
Es comodidad y molicie.
El AA no se puso de moda casi hasta el cambio de siglo y no pasaba nada.
No te voy a discutir que da gusto estar fresquito pero de ahí a ser una necesidad vital, hay un trecho.
Pero bueno, para gustos, los colores.
#10 Lo único vital es el agua y los alimentos, si tenemos que prescindir de todo lo vital...
Son maquinas que nos facilitan la vida y son necesarios en la sociedad actual, al igual que un lavavajillas, una lavadora o un coche.
Vivir se puede vivir, pero peor. Es como vivir sin sanidad pública...se puede vivir, pero peor.
Muros de 1 metro de ancho... Este mesón está en Puerto Lápice... Hace un fresquito en el interior ACOJONANTE.
http://www.flickr.com/photos/vcastelo/2477906517/
#3 Solo en parte... Pero, de todos modos, estaba pensando en las siestas de mi infancia... En un tros (un terrenito, vamos) cerca de Tarragona la mayoría y, las menos, en cortijos de Cazorla y de otro punto de Jaén (que no acierto a ubicar).
Por tu emoticono me temo que Proust me ha jugado una mala pasada...
Aquí, en Sevilla, el aire acondicionado es un bien tan esencial como el agua. Me han hecho una buena oferta por un aparato y tengo preinstalación de aire, pero el robo constante de las eléctricas ha hecho que siga con el abanico. Nunca he vivido por encima de mis posibilidades y no voy a empezar ahora.
Y lo bien que se está a la sombrita de un árbol...
Por cierto, la tercera fotografía me ha recordado a Soylent Green cosa mala, mala. Qué agobio en un momento...
#2 "Y lo bien que se está a la sombrita de un árbol..."
¿Eres del norte, verdad?