AIG, la empresa que más ayudas ha recibido del gobierno de Estados Unidos, está repartiendo bonos millonarios. Entre ellos unos bonos dedicados a "retener talento en la empresa" que perciben once empleados que ya no están en nómina.
El capitalismo no es un mal sistema, pero no por ello son justificables las críticas que en ocasiones recibe el sector público. Al igual que en las administraciones se desperdicia dinero, también las grandes empresas son un foco de despilfarro sin sentido.
Y es que las grandes empresas son el peor ejemplo de capitalismo que existe. Son como administraciones públicas pero sin ningún control, se hacen leyes a medida para ellas y malgastan el dinero de accionistas más preocupados del valor teórico en bolsa que del auténtico funcionamiento de la empresa.
La sociedad de consumo ha creado estos monstruos, ahora le toca a la hacienda pública evitar su caída en tiempos de crisis. Una demolición controlada de este tipo de empresas sería un buen comienzo.
#2 La idea es que ya no es empleado, así que no tienen ningún sentido darle un bono para retenerlo.
Es como pagar un bono de puntualidad a alguien que nunca llega a su hora, pero de 4.6 millones.
Comentarios
El capitalismo no es un mal sistema, pero no por ello son justificables las críticas que en ocasiones recibe el sector público. Al igual que en las administraciones se desperdicia dinero, también las grandes empresas son un foco de despilfarro sin sentido.
Y es que las grandes empresas son el peor ejemplo de capitalismo que existe. Son como administraciones públicas pero sin ningún control, se hacen leyes a medida para ellas y malgastan el dinero de accionistas más preocupados del valor teórico en bolsa que del auténtico funcionamiento de la empresa.
La sociedad de consumo ha creado estos monstruos, ahora le toca a la hacienda pública evitar su caída en tiempos de crisis. Una demolición controlada de este tipo de empresas sería un buen comienzo.
#2 La idea es que ya no es empleado, así que no tienen ningún sentido darle un bono para retenerlo.
Es como pagar un bono de puntualidad a alguien que nunca llega a su hora, pero de 4.6 millones.
Que tal: Bono de 4.6 millones de dólares para retener un empleado por su talento.