han finalizado los trabajos de la cuarta campaña, que se desarrolló de abril a junio de este año y tuvo un parón veraniego. Se trata del proyecto de investigación «Estudio de la hecatombe animal del yacimiento de 'Casas del Turuñuelo'. La gestión de la cabaña ganadera y sus implicaciones socioeconómicas y rituales en época tartésica»
#1 Así es, tanto que probablemente esta campaña forme parte de un proyecto de 3-5 años, que es lo habitual. Por demás que este yacimiento ha superado en "glamour tartésico" al célebre Cancho Roano, aunque ambos son espectaculares.
#4 Coincido, por muchas cosas. Desde luego sobre "palacios-santuario" tartessios éste del Turuñuelo viene a ser la guinda, por potencia del hallazgo y por las respuestas que ofrece sobre esa etapa de clausura del mundo tartessio en su colonización de las tierras del Guadiana.
Y el tema de los recursos (en realidad pecata minuta, algo de material y alojamiento/manutención de estudiantes voluntarios) es la pelea más ingrata y recurrente de cualquier arqueólogo, mendigar fondos a las instituciones presentando sus proyectos.
Comentarios
Concluye la campaña de este año. Ahí hay para excavar decenios.
#1 Así es, tanto que probablemente esta campaña forme parte de un proyecto de 3-5 años, que es lo habitual. Por demás que este yacimiento ha superado en "glamour tartésico" al célebre Cancho Roano, aunque ambos son espectaculares.
#1 Es que está empezando a nublarse y todos sabemos que los arqueólogos funcionan solo con energía solar.
#2 Para mi es uno de los descubrimientos más importantes hechos en Espàña en muchisimo tiempo. Se le deberian dedicar mas recursos
#4 Coincido, por muchas cosas. Desde luego sobre "palacios-santuario" tartessios éste del Turuñuelo viene a ser la guinda, por potencia del hallazgo y por las respuestas que ofrece sobre esa etapa de clausura del mundo tartessio en su colonización de las tierras del Guadiana.
Y el tema de los recursos (en realidad pecata minuta, algo de material y alojamiento/manutención de estudiantes voluntarios) es la pelea más ingrata y recurrente de cualquier arqueólogo, mendigar fondos a las instituciones presentando sus proyectos.