Cada día hay mas presión de la comunidad musulmana para introducir la religión islámica en las aulas. Lo que es cierto es que en los colegios e institutos cada vez es mayor el porcentaje de estudiantes musulmanes.
#1:
Y es por eso por lo que la única manera práctica y realista de abordar el tema es eliminar la religión de las aulas, y que sea como la artes marciales: se puede ceder un aula por la tarde, pero si metemos karate como asignatura, mañana vendrán los de taekwondo, kungfu y judo.... Simplemente no es práctico....
Sí se aborda desde la ideologia te creas enemigos... Simplemente es lo único factible
Y es por eso por lo que la única manera práctica y realista de abordar el tema es eliminar la religión de las aulas, y que sea como la artes marciales: se puede ceder un aula por la tarde, pero si metemos karate como asignatura, mañana vendrán los de taekwondo, kungfu y judo.... Simplemente no es práctico....
Sí se aborda desde la ideologia te creas enemigos... Simplemente es lo único factible
#1 Pues desde el punto de vista practico, tampoco veo tan mal que a los niños musulmanes se les enseñe el islam con un temario y unos profesores controlados y auditados por el estado. En lugar de que se les enseñen a saber que cosas pirados radicalizados en escuelas de Arabia Saudí.
#2 Los profesores de religión católica los elige y los contrata el arzobispado (eso sí, con nuestro dinero) así que los musulmanes los tendrá que elegir su mafia correspondiente (pagados con nuestro dinero también, claro está)
#1 Porque hay muchos intereses de la religión católica. Por eso consideran mejor hacer locuras como la enseñanza de otras supersticiones a eliminar la suya.
#10 También era parte de nuestra cultura el derecho de pernada, la quema de brujas, el asesinato de personas por blasfemos o herejes, la esclavitud, y otras simpáticas costumbres de lo más culturales, como las de los toros o la corrupción, que todavía sobreviven junto con la enseñanza de supersticiones (todas absurdas e incoherentes) en las escuelas.
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Y es por eso por lo que la única manera práctica y realista de abordar el tema es eliminar la religión de las aulas, y que sea como la artes marciales: se puede ceder un aula por la tarde, pero si metemos karate como asignatura, mañana vendrán los de taekwondo, kungfu y judo.... Simplemente no es práctico....
Sí se aborda desde la ideologia te creas enemigos... Simplemente es lo único factible
#1 Pues desde el punto de vista practico, tampoco veo tan mal que a los niños musulmanes se les enseñe el islam con un temario y unos profesores controlados y auditados por el estado. En lugar de que se les enseñen a saber que cosas pirados radicalizados en escuelas de Arabia Saudí.
#2 Los profesores de religión católica los elige y los contrata el arzobispado (eso sí, con nuestro dinero) así que los musulmanes los tendrá que elegir su mafia correspondiente (pagados con nuestro dinero también, claro está)
#4 #6 Eso se debe al concordato,no hay ningun motivo legal para que tenga que pasar lo mismo con el islam.
#8 Si no recuerdo mal la ley establece que cada comunidad religiosa será la que eligirá a los profesores.
#2 ningún grupo organizado va a aceptar una visión crítica de sus creencias...
#2 los profesores los elegirá el "obispo" musulmán
#1 Porque hay muchos intereses de la religión católica. Por eso consideran mejor hacer locuras como la enseñanza de otras supersticiones a eliminar la suya.
Cada día hay mas presión de la comunidad musulmana para....... (Ponga usted lo que quiera)
El futuro ya está aquí.
Hay que apostar por la filososofia, que es eso de razonar y entender el razonamiento.
La religión católica no puede desaparecer de las aulas porque es parte de nuestra cultura .
#10 También era parte de nuestra cultura el derecho de pernada, la quema de brujas, el asesinato de personas por blasfemos o herejes, la esclavitud, y otras simpáticas costumbres de lo más culturales, como las de los toros o la corrupción, que todavía sobreviven junto con la enseñanza de supersticiones (todas absurdas e incoherentes) en las escuelas.
#12 Excelente comparación.