El Juzgado Social número 12 de Barcelona ha estimado un recurso presentado por un programador informático de 41 años y condena al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) a que le abone una pensión vitalicia de casi 1.000 euros mensuales, con retrasos desde febrero de 2020. El tribunal considera que el recurrente está en situación de incapacidad permanente absoluta para todo tipo de trabajo derivada de una enfermedad común. La sentencia indica que el INSS denegó al recurrente su petición de incapacidad.
Comentarios
El titular es totalmente sensacionalista, se le concede incapacidad por presentar un trastorno psicótico, no por el alcoholismo.
" Fue determinante su trayectoria profesional de 20 años, todos alternando contratos en cárnicas subcontratadas por Indra".
#6 trastorno psicótico por dependencia al alcohol
Que no se lo gaste todo en vino.
Enlace alternativo por si no os deja leerla: https://archive.is/pOdnU
Igual el doctor le ha recomendado dejar las barras y así no... Venga adiós
#6 Yo ya me he hecho mi plan para beber mientras trabajo y no me vas a cambiar de idea.
Quiero saber su cuenta en Menéame
Seguro que ahora con tanto tiempo libre se pasa el día en el bar
#6 Chorradas. Si fuera por eso le habrían ofrecido la alcaldía de Madrid.
#5 a lo mejor te matas intentándolo, pero allá tu
#12 en cualquiera de los dos casos, objetivo conseguido: no volver a trabajar.
Tremendo. Me voy a dedicar a drogarme y luego pedir una paguita.