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#11:
#9 Pues fueron más de 50 tíos y muchos de ellos lo están denunciando en sus cuentas. También ha habido centros sociales que han sacado manifiestos denunciando los hechos, y multitud de comentarios en esos hilos hablando sobre lo sucedido. Nadie lo desmiente, ni las propias feministas, al contrario.
#5:
#4 Porque lo publican ellas mismas en sus twitters y facebooks:
https://mobile.twitter.com/kalindama/status/1138776574524887040
https://mobile.twitter.com/annaprats/status/1138212210621190145?s=08
Y han salido varios comunicados oficiales.
https://mobile.twitter.com/kalindama/status/1138776574524887040
https://mobile.twitter.com/annaprats/status/1138212210621190145?s=08
Y han salido varios comunicados oficiales.
#1:
En castellano, la parte del relato de los hechos:
Ayer, primero de junio, fuimos convocados un numeroso grupo de activistas en la okupa compostelana O Aturuxo das Marías. Se trataba de una "alerta feminista", nos dijeron, era muy importante que fuéramos los hombres de los movimientos contestatarios gallegos, pues las compañeras tenían algo grave que decirnos. Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto.
Allí aparecimos más de medio centenar de hombres relacionados de un modo u otro con el entorno activista. Muchos queríamos saber lo que había pasado y nos sentíamos comprometidos a tratar el tema y ofrecer algún tipo de respuesta. Otra gente que estaba convocada no pudo o quiso acudir. Tras una larga espera en la puerta de la okupa abrieron el paso y nos hicieron subir al piso de arriba. Allí, atónitos, nos encontramos con las ventanas y paredes empapeladas con nuestras fotos y nombres; al menos habría un centenar.
De repente irrumpieron las chicas, superaban ampliamente la treintena, venían muy serias y enfadadas. Repartieron rotuladores y nos dijeron que marcáramos un "si" sobre nuestras fotos los que se reconocieran a sí mismos como agresores. También nos conminaron a denunciar a los demás. Poco a poco la gente comenzó a señalarse a sí misma, en medio de un clima cada vez más enrarecido por la presión grupal. Algunos señalaban también a otros; hubo quién marcó absolutamente todas las fotos, los conociera o no. Fuimos muy pocos los que nos negamos a participar de este proceso autoinculpatorio, el ambiente de condicionamiento colectivo era muy fuerte y opresivo.
Una vez terminado el rosario de denuncias y “confesiones” empezaron a marcar ellas a los que consideraban agresores. Caímos casi todos. No dieron explicaciones y a gritos nos dijeron que no teníamos permitido hablar. Algunos aún seguimos devanándonos los sesos tratando de saber el motivo por el que fuimos señalados. La tensión aumentó. Nos increparon, nos amenazaron, nos gritaron. Nos dijeron que todos éramos violadores, que ninguno era inocente y que, como hombres, encubríamos las agresiones de los demás (y yo que siempre pensé que eso lo hacíamos todxs, independientemente del sexo).
Pública y expresamente nos declararon la guerra, así nos lo dijeron, y manifestaron que querían romper las relaciones con nosotros (los hombres de su entorno). Nos dijeron que ninguno se salvaba, que éramos armas de destrucción masiva, que tendríamos que cortarnos las pollas y meternos cactus por el culo. Leyeron varios manifiestos absolutamente delirantes (https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/) en un clima de hostilidad creciente. Nosotros, sumisos, agachábamos la cabeza.
Fue entonces cuando comenzaron las agresiones. Primero de forma más localizada, contra gente concreta. Insultos, gritos, bofetadas, escupitajos. Ninguno hicimos ni dijimos nada. Luego vinieron las patadas y los puñetazos. Entiendo que aún se centraban en venganzas concretas por hechos especialmente graves, pero pronto las agresiones se volvieron gratuitas y arbitrarias: una chica le dijo a alguien mientras lo abofeteaba que no sabía quién era pero que no le gustaba su mirada. Ninguno hacíamos nada mientras arreciaba la violencia. El que más hostias llevó fue uno que había pintado un interrogante sobre su foto, parodiando el proceso autoinculpatorio; recibió una auténtica paliza mientras un cordón de mujeres, en actitud chulesca, defendían la agresión. Nunca en mi vida había visto un abuso semejante salvo, quizá, en los lúgubres sótanos de alguna comisaría.
Una vez se hubieron despachado a gusto, nos obligaron a marcharnos, pero antes las chicas formaron un pasillo en la puerta. Según íbamos saliendo comenzaron a repartir golpes: collejas, empujones, bofetadas... Gratuitos, por la cara. Incluso a gente que no había sido señalada como agresora y con un comportamiento escrupuloso e intachable. Daba igual, eran hombres. Esa misma mañana los saludaban con sonrisas y ahora les cruzaban la cara a bofetadas.
Salimos como zombis, las bocas abiertas y la mirada perdida. Apenas hablábamos, incrédulos, tratando de digerir lo que acababa de pasar. Nuestras amigas, nuestras compañeras de lucha, para algunos incluso sus novias, de golpe y porrazo nos trataban del mismo modo que lo haría la policía. Nos acababan de humillar, vejar y torturar de la forma cruel y gratuita típica de los antidisturbios. Puede que alguno lo mereciese, pero la mayoría desde luego que no. Habíamos asistido inermes a un linchamiento público.
Y aún por encima la mayoría de nosotros quedamos marcados como agresores. ¡Sin ni siquiera saber por qué! Una condena sumaria de la que no tenemos derecho a conocer las causas. Ni el propio Kafka habría podido idear un sinsentido tan terrorífico.
Ayer, primero de junio, fuimos convocados un numeroso grupo de activistas en la okupa compostelana O Aturuxo das Marías. Se trataba de una "alerta feminista", nos dijeron, era muy importante que fuéramos los hombres de los movimientos contestatarios gallegos, pues las compañeras tenían algo grave que decirnos. Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto.
Allí aparecimos más de medio centenar de hombres relacionados de un modo u otro con el entorno activista. Muchos queríamos saber lo que había pasado y nos sentíamos comprometidos a tratar el tema y ofrecer algún tipo de respuesta. Otra gente que estaba convocada no pudo o quiso acudir. Tras una larga espera en la puerta de la okupa abrieron el paso y nos hicieron subir al piso de arriba. Allí, atónitos, nos encontramos con las ventanas y paredes empapeladas con nuestras fotos y nombres; al menos habría un centenar.
De repente irrumpieron las chicas, superaban ampliamente la treintena, venían muy serias y enfadadas. Repartieron rotuladores y nos dijeron que marcáramos un "si" sobre nuestras fotos los que se reconocieran a sí mismos como agresores. También nos conminaron a denunciar a los demás. Poco a poco la gente comenzó a señalarse a sí misma, en medio de un clima cada vez más enrarecido por la presión grupal. Algunos señalaban también a otros; hubo quién marcó absolutamente todas las fotos, los conociera o no. Fuimos muy pocos los que nos negamos a participar de este proceso autoinculpatorio, el ambiente de condicionamiento colectivo era muy fuerte y opresivo.
Una vez terminado el rosario de denuncias y “confesiones” empezaron a marcar ellas a los que consideraban agresores. Caímos casi todos. No dieron explicaciones y a gritos nos dijeron que no teníamos permitido hablar. Algunos aún seguimos devanándonos los sesos tratando de saber el motivo por el que fuimos señalados. La tensión aumentó. Nos increparon, nos amenazaron, nos gritaron. Nos dijeron que todos éramos violadores, que ninguno era inocente y que, como hombres, encubríamos las agresiones de los demás (y yo que siempre pensé que eso lo hacíamos todxs, independientemente del sexo).
Pública y expresamente nos declararon la guerra, así nos lo dijeron, y manifestaron que querían romper las relaciones con nosotros (los hombres de su entorno). Nos dijeron que ninguno se salvaba, que éramos armas de destrucción masiva, que tendríamos que cortarnos las pollas y meternos cactus por el culo. Leyeron varios manifiestos absolutamente delirantes (https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/) en un clima de hostilidad creciente. Nosotros, sumisos, agachábamos la cabeza.
Fue entonces cuando comenzaron las agresiones. Primero de forma más localizada, contra gente concreta. Insultos, gritos, bofetadas, escupitajos. Ninguno hicimos ni dijimos nada. Luego vinieron las patadas y los puñetazos. Entiendo que aún se centraban en venganzas concretas por hechos especialmente graves, pero pronto las agresiones se volvieron gratuitas y arbitrarias: una chica le dijo a alguien mientras lo abofeteaba que no sabía quién era pero que no le gustaba su mirada. Ninguno hacíamos nada mientras arreciaba la violencia. El que más hostias llevó fue uno que había pintado un interrogante sobre su foto, parodiando el proceso autoinculpatorio; recibió una auténtica paliza mientras un cordón de mujeres, en actitud chulesca, defendían la agresión. Nunca en mi vida había visto un abuso semejante salvo, quizá, en los lúgubres sótanos de alguna comisaría.
Una vez se hubieron despachado a gusto, nos obligaron a marcharnos, pero antes las chicas formaron un pasillo en la puerta. Según íbamos saliendo comenzaron a repartir golpes: collejas, empujones, bofetadas... Gratuitos, por la cara. Incluso a gente que no había sido señalada como agresora y con un comportamiento escrupuloso e intachable. Daba igual, eran hombres. Esa misma mañana los saludaban con sonrisas y ahora les cruzaban la cara a bofetadas.
Salimos como zombis, las bocas abiertas y la mirada perdida. Apenas hablábamos, incrédulos, tratando de digerir lo que acababa de pasar. Nuestras amigas, nuestras compañeras de lucha, para algunos incluso sus novias, de golpe y porrazo nos trataban del mismo modo que lo haría la policía. Nos acababan de humillar, vejar y torturar de la forma cruel y gratuita típica de los antidisturbios. Puede que alguno lo mereciese, pero la mayoría desde luego que no. Habíamos asistido inermes a un linchamiento público.
Y aún por encima la mayoría de nosotros quedamos marcados como agresores. ¡Sin ni siquiera saber por qué! Una condena sumaria de la que no tenemos derecho a conocer las causas. Ni el propio Kafka habría podido idear un sinsentido tan terrorífico.
#15:
#12 Sí que lo menciona:
Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto. (...)
Es cierto que las agresiones sexuales merecen un castigo, un rechazo colectivo y la elaboración de análisis y protocolos que permitan reconocerlas y atajarlas. Pero cuando permitimos que la indignación por un hecho horrible provoque respuestas abusivas e indiscriminadas contra colectivos enteros por su condición física o sexual, creamos el caldo de cultivo que desemboca inexorablemente en la creación del discurso totalitario. (...)
¿Pero justifica eso la humillación y la violencia a la que hemos sido sometidos por el mero hecho de ser hombres? Es cierto que las mujeres han sufrido en silencio muchas injusticias durante muchos siglos, es cierto que sufren aún ahora y en nuestros propios círculos numerosas opresiones. Pero en mi opinión eso no justifica una venganza humillante y colectiva contra TODOS los hombres a los que consiguieron reunir. Justo los que acuden a una “alerta feminista”, o sea que muchos de ellos, en cierto modo, son de los pocos que en esta sociedad tratan de cuestionarse sus propios privilegios.
Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto. (...)
Es cierto que las agresiones sexuales merecen un castigo, un rechazo colectivo y la elaboración de análisis y protocolos que permitan reconocerlas y atajarlas. Pero cuando permitimos que la indignación por un hecho horrible provoque respuestas abusivas e indiscriminadas contra colectivos enteros por su condición física o sexual, creamos el caldo de cultivo que desemboca inexorablemente en la creación del discurso totalitario. (...)
¿Pero justifica eso la humillación y la violencia a la que hemos sido sometidos por el mero hecho de ser hombres? Es cierto que las mujeres han sufrido en silencio muchas injusticias durante muchos siglos, es cierto que sufren aún ahora y en nuestros propios círculos numerosas opresiones. Pero en mi opinión eso no justifica una venganza humillante y colectiva contra TODOS los hombres a los que consiguieron reunir. Justo los que acuden a una “alerta feminista”, o sea que muchos de ellos, en cierto modo, son de los pocos que en esta sociedad tratan de cuestionarse sus propios privilegios.
Comentarios
#9 Pues fueron más de 50 tíos y muchos de ellos lo están denunciando en sus cuentas. También ha habido centros sociales que han sacado manifiestos denunciando los hechos, y multitud de comentarios en esos hilos hablando sobre lo sucedido. Nadie lo desmiente, ni las propias feministas, al contrario.
#4 Porque lo publican ellas mismas en sus twitters y facebooks:
Y han salido varios comunicados oficiales.
En castellano, la parte del relato de los hechos:
Ayer, primero de junio, fuimos convocados un numeroso grupo de activistas en la okupa compostelana O Aturuxo das Marías. Se trataba de una "alerta feminista", nos dijeron, era muy importante que fuéramos los hombres de los movimientos contestatarios gallegos, pues las compañeras tenían algo grave que decirnos. Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto.
Allí aparecimos más de medio centenar de hombres relacionados de un modo u otro con el entorno activista. Muchos queríamos saber lo que había pasado y nos sentíamos comprometidos a tratar el tema y ofrecer algún tipo de respuesta. Otra gente que estaba convocada no pudo o quiso acudir. Tras una larga espera en la puerta de la okupa abrieron el paso y nos hicieron subir al piso de arriba. Allí, atónitos, nos encontramos con las ventanas y paredes empapeladas con nuestras fotos y nombres; al menos habría un centenar.
De repente irrumpieron las chicas, superaban ampliamente la treintena, venían muy serias y enfadadas. Repartieron rotuladores y nos dijeron que marcáramos un "si" sobre nuestras fotos los que se reconocieran a sí mismos como agresores. También nos conminaron a denunciar a los demás. Poco a poco la gente comenzó a señalarse a sí misma, en medio de un clima cada vez más enrarecido por la presión grupal. Algunos señalaban también a otros; hubo quién marcó absolutamente todas las fotos, los conociera o no. Fuimos muy pocos los que nos negamos a participar de este proceso autoinculpatorio, el ambiente de condicionamiento colectivo era muy fuerte y opresivo.
Una vez terminado el rosario de denuncias y “confesiones” empezaron a marcar ellas a los que consideraban agresores. Caímos casi todos. No dieron explicaciones y a gritos nos dijeron que no teníamos permitido hablar. Algunos aún seguimos devanándonos los sesos tratando de saber el motivo por el que fuimos señalados. La tensión aumentó. Nos increparon, nos amenazaron, nos gritaron. Nos dijeron que todos éramos violadores, que ninguno era inocente y que, como hombres, encubríamos las agresiones de los demás (y yo que siempre pensé que eso lo hacíamos todxs, independientemente del sexo).
Pública y expresamente nos declararon la guerra, así nos lo dijeron, y manifestaron que querían romper las relaciones con nosotros (los hombres de su entorno). Nos dijeron que ninguno se salvaba, que éramos armas de destrucción masiva, que tendríamos que cortarnos las pollas y meternos cactus por el culo. Leyeron varios manifiestos absolutamente delirantes (https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/) en un clima de hostilidad creciente. Nosotros, sumisos, agachábamos la cabeza.
Fue entonces cuando comenzaron las agresiones. Primero de forma más localizada, contra gente concreta. Insultos, gritos, bofetadas, escupitajos. Ninguno hicimos ni dijimos nada. Luego vinieron las patadas y los puñetazos. Entiendo que aún se centraban en venganzas concretas por hechos especialmente graves, pero pronto las agresiones se volvieron gratuitas y arbitrarias: una chica le dijo a alguien mientras lo abofeteaba que no sabía quién era pero que no le gustaba su mirada. Ninguno hacíamos nada mientras arreciaba la violencia. El que más hostias llevó fue uno que había pintado un interrogante sobre su foto, parodiando el proceso autoinculpatorio; recibió una auténtica paliza mientras un cordón de mujeres, en actitud chulesca, defendían la agresión. Nunca en mi vida había visto un abuso semejante salvo, quizá, en los lúgubres sótanos de alguna comisaría.
Una vez se hubieron despachado a gusto, nos obligaron a marcharnos, pero antes las chicas formaron un pasillo en la puerta. Según íbamos saliendo comenzaron a repartir golpes: collejas, empujones, bofetadas... Gratuitos, por la cara. Incluso a gente que no había sido señalada como agresora y con un comportamiento escrupuloso e intachable. Daba igual, eran hombres. Esa misma mañana los saludaban con sonrisas y ahora les cruzaban la cara a bofetadas.
Salimos como zombis, las bocas abiertas y la mirada perdida. Apenas hablábamos, incrédulos, tratando de digerir lo que acababa de pasar. Nuestras amigas, nuestras compañeras de lucha, para algunos incluso sus novias, de golpe y porrazo nos trataban del mismo modo que lo haría la policía. Nos acababan de humillar, vejar y torturar de la forma cruel y gratuita típica de los antidisturbios. Puede que alguno lo mereciese, pero la mayoría desde luego que no. Habíamos asistido inermes a un linchamiento público.
Y aún por encima la mayoría de nosotros quedamos marcados como agresores. ¡Sin ni siquiera saber por qué! Una condena sumaria de la que no tenemos derecho a conocer las causas. Ni el propio Kafka habría podido idear un sinsentido tan terrorífico.
#1 Vaya panda de pusilánimes, luego sueltan"...nuestras compañeras de lucha...". ¿Qué van a luchar nada si se dejan hasta escupir sin dejar de agachar la cabeza?
O igual es que son masocas y pasaron la tarde de su vida.
#12 Sí que lo menciona:
Sabíamos que se habían producido algunas agresiones dentro del entorno e intuíamos que aquello sería una llamada de atención colectiva al respecto. (...)
Es cierto que las agresiones sexuales merecen un castigo, un rechazo colectivo y la elaboración de análisis y protocolos que permitan reconocerlas y atajarlas. Pero cuando permitimos que la indignación por un hecho horrible provoque respuestas abusivas e indiscriminadas contra colectivos enteros por su condición física o sexual, creamos el caldo de cultivo que desemboca inexorablemente en la creación del discurso totalitario. (...)
¿Pero justifica eso la humillación y la violencia a la que hemos sido sometidos por el mero hecho de ser hombres? Es cierto que las mujeres han sufrido en silencio muchas injusticias durante muchos siglos, es cierto que sufren aún ahora y en nuestros propios círculos numerosas opresiones. Pero en mi opinión eso no justifica una venganza humillante y colectiva contra TODOS los hombres a los que consiguieron reunir. Justo los que acuden a una “alerta feminista”, o sea que muchos de ellos, en cierto modo, son de los pocos que en esta sociedad tratan de cuestionarse sus propios privilegios.
#16 Muy bien, ya pasamos de negarlo a admitirlo, pero justificándolo.
Lo sabían porque había un comunicado al respecto, no porque lo presenciasen, ni porque haya una sentencia al respecto. Solamente de oidas. Igual que las mujeres de esos espacios. Los hombres que acudieron a los hechos relatados eran de todas partes de Galicia.
#19 Si te recopilo pruebas, con comentarios y comunicados oficiales tanto de asociaciones, como de feministas, como de hombres que fueron víctimas de los hechos, ¿qué opinarías? Y aunque aún con eso quieras negar la realidad, ¿podrías igualmente decirme qué opinarías si presenciases unos hechos como los que se relatan? ¿Si te parecería bien, mal, etc.?
El comunicado que las feministas leyeron a los hombres que posteriormente agredieron, "Declaración de guerra": https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/
"PERO VIOLADORES SOIS TODOS. Esto no es cuestión de unos individuos en concreto.
VIOLADORES SOIS TODOS. ESTÁIS PROGRAMADOS PARA VIOLAR.
Estáis programados para violarnos."
#2 es un texto anónimo, basado en un manifiesto anónimo, de un centro social anónimo. Podría ser perfectamente literatura. Por que tengo que creérmelo?
#25 A poco que investigas ves cómo lo reconocen tanto feministas como afectados. Hasta han salido "comunicados" oficiales repudiando los hechos. En este caso hasta eliminan los comentarios debido a las críticas que les llovieron: https://m.facebook.com/csadosar/posts/1240397329456804?__xts__%5B0%5D=68.ARDvcGjHnqwqbWNLdnfRH9Unqz9F6J197XImJ_8Lo73pjm10OhhOHGaoQf6RjOEVrBRdRMQsXWHYSwGCAf57Z2XEGfZyuzZTu_XdH2LMdYCaKnlvevq-2i0K8HxoUyWamr1RawYzsKNvI-ZmABWWD34ppd95zw5bDTkbxSv3H-E7kHbOLV9Dn02Oire8nkSqz6PexKDhnvx_EpbWzCrtm0gXHwjtfSaMiE_qnS4JZ30B7r6tdD_TFowEPTXMeDx8IBLxMJE5bB59V8ICjqvNjTS1Xe8OOzJRFql8q0PuyESc7D8fSuS2x8vswmPxgJPtFk0tVqyn1OhPsYZlsPC-9g&__tn__=-R
Y es perfectamente fácil localizar a los afectados en redes sociales y preguntarles personalmente uno por uno.
#3 Lo primero que he pensado pero viendo la red de blogs y enlaces o el manifiesto con nombres y apellidos sería una performance muy elaborada
#19 No hace falta que me contestes a #20, ya lo has hecho votando positivo a #10:
Que son una panda de pusilánimes que se dejan escupir sin dejar de agachar la cabeza.
#22 Es decir, que como otro tipo abusó, tú te comes una paliza
No sé yo quién se retrata
#3 perdón, negativo involuntario
Pues sí, suena a invent.
Otro artículo que confirma que es totalmente real: El sectarismo en el movimiento libertario (GAL)
El sectarismo en el movimiento libertario (GAL)
ogajeironagavea.wordpress.com#18 Repito: admito el comunicado no el cuentito que lo acompaña.
#31 Ya lo he visto. Todo super creíble.
En fin, déjalo que me aburre el tema, ya está todo dicho en este meneo irrelevante.
#7 El manifiesto lo será, que por cierto al leer los hilos es una reacción a varios abusos, cosa que no cuenta el post.
Lo que no me creo es el relato cyberpunk del secuestro y las fotos.
#20 Me parece mucho más grave que haya habido abusos y que además miraran para otro lado.
Veo que soslayas el tema de los abusos, retratado quedas, campeón.
#29 No sale ninguna paliza, aunque me lo he leído en diagonal, igual sale por algún lado en el INVENT ese.
#30 Sí que sale. Si lo lees en diagonal es lo que pasa.
#3 Yo conozco un poco ese ambiente y no me parece tan invent. Nunca había visto algo así, pero tampoco me extraña con el personal que frecuenta esos sitios.
#12 Espera que cadena de agresiones? Es decir, esos señores han agredido a esas señoras?
#25 https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/
Si, si
eso s, las violaron pero como condena no fueron a la policia, les dieron 4 ostias y los echaron. A ver quien es la que "invent" aqui.
Les hacen el pasillo a la salida a todos, les insultan y les dicen que tendrian que castrarlos y meterles una piña por el culo. Ademas el que mas cobró fue el que no se autoinculpo.
https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/
Esta es la mierda de feminismo que defienden algunos, el del odio al hombre.
#28 De la que relata el texto.
Bueno, a mí me parece bien que les den de hostias a los aliados de las feminazis las propias feminazis. Es un poco de justicia poética. Y sarna con gusto no pica.
Ahora bien, que intenten lo mismo con personas normales y a ver cómo acaba la cosa. Yo no sé cómo reaccionaría, pero desde luego no permitiría semejante atropello sobre mi persona o sobre cualquier otra. Si la cosa escala no sé cómo acabaría. Seguramente en comisaría.
Respecto a los que dicen que esto es invent, viendo las publicaciones en Twitter y FB de algunas personas y entidades, parece bastante verídico.
#45 Ya ves. Aqui han corrido a decir que es inventada, que lo han publicado en un blog al uso.. Eso si, cuando algunas desapresivas han tirado a la basura la carrera de un hombre con un tweet diciendo "fulano de tal es un acosador" hay que creerlo a pies puntillas.
Luego nos asombramos porque keanu Reeves sale en las fotos con chicas con las palmas hacia fuera, para que se vea en la foto. Ahora hasta en hollywood evitan quedarse a solas con una mujer, aunque sea una comida de negocios o despacho, por el riesgo de que diga que la acosaste. Basta con que diga que le entraste o que le rozaste con el brazo metiendo mano, es suficiente.
#27 ¿De qué paliza hablas?
#36 Negativo por suponer cosas de mi gratuitamente.
Yo jamás he mirado para otro lado cuando he sabido de abusos, echo mas frecuente de lo que me gustaría.
No quieras limpiar tu conciencia pensando que todos son como tú.
#43 Bueno que mas da.
Si el tema no esta en que sean gilipollas y se lo hayan ganadoa pulso, es que encima decimos que es todo inventado y que vayan a planchar bragas a su casa (a los tios).
Un 5% de esto le pasa a un grupo de chicas, asistiriamos a especial informativo.
#16 Espera , a señoras de ahí las han agredido. Pero estos señores u otros señores?
#9 Pues el manifiesto es para enmarcarlo...Creo que no se representan más que así mismas (a dios gracias) porque hacen mas mal que bien al feminismo.
#44 toda la razón.
Esto se pone en duda pero a la hermana hay que creerla sí o sí... Y por supuesto, esto incluye a ciertos medios que se la suda la veracidad de la info que ellos dan.
#22 Ya se que no me vas a contestar. Pero por favor, de que abusos hablamos? Los han cometido esos hombres?
#11 Claro, claro.
¿Y la parte de que esto, sea lo que sea, viene de una cadena de agresiones porque no la menciona el artículo?
#3 https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/
https://dworkinista.wordpress.com/2019/06/11/declaracion-de-guerra/
6 abusos violaciones, segun este comunicado que si que defiendes, lo demas son mentirigillas inventadas.
Donde estan las denuncias a la policia por un "abuso/violacion".?
Es acojonante lo alienados que estais algunos.
Preguntate si un 5% de esto hubiera pasado a una mujer, si estarias diciendo lo mismo.
Y luego hablas tu de soslayar... "invent" dices. puto argumento de mierda
INVENT
#42 una piña no, dicen un cactus
¿Sabéis ese refrán que dice que quién con niños se acuesta...? Pues la nueva versión es "quien a locas se acerca, fostiao termina"
#3 los de #4 son cuentas falsas?
esta noticia tendría un gritón de meneos si fuera al revés, un grupo de Incels haciendo una encerrona a 50 chicas y escupiendoles y recriminandoles mentiras
pero la imparciialidad y la neutralidad se perdió con este tema hace rato, espero que la recuperemos por el bien de todos...
#21 lo son.
#22 Pues claro que ha habido abusos, pero olvidas que tu también mirabas hacia otro lado, igual que yo, lo que nos pone a la misma altura que todos los que no hicieron nada por ayudar a estas 6 mujeres. Pero no conozco su historia realmente.
Sin embargo veo que también hubo otros abusos, esta vez contra hombres, y en ese caso no solo es que mirases hacia otro lado, sino que tú los has justificado reiteradamente, incluso niegas las evidencias y el reconocimiento de los hechos por parte de todos, llamas mentirosas a las victimas de los abusos, que fueron seleccionados únicamente por su sexo, y te unes a la burla general contra las víctimas. ¿No sabes acaso lo que sufre una mujer víctima de abusos cuando la llaman mentirosa y le dicen INVENT? Tu igual no puedes entenderlo, pero yo lo comprendo muy bien.
Mira, tienes razón al decir que esto no ha sido un abuso, porque ha habido INTIMIDACION, esta MANADA ha aprovechado su número para intimidar a las víctimas, han usado la violencia verbal, física y la humillación. Y si hay intimidación ya no es abuso, es violación (de su integridad moral, por lo menos). Aunque niegues la violencia, no puedes negar la intimidación que sufrieron las victimas.
Dejemos de justificar las agresiones feministas, han cometido un error, se les ha ido de las manos y han protagonizado un suceso lamentable que está haciendo muchísimo daño al feminismo. No te pongas del lado de los palmeros de VOX y de los machistas, por favor. Un poco de autocrítica, por dios.
Pues la verdad si que suena a un INVENT descarado. Y si no es invent, pues no me imagino que nadie se hiciera paso a hostias hasta la salida; y si nadie lo hizo, pues llorad como una mujer lo que no supisteis defender como hombres
50 violadores (segun ellas) se dejan encerrar escupir y dar de ostias por 20 chavalas. Ya no hacen violadores como los de antes.
#15 O sea, que lo sabían y no habían hecho nada.
Esto cada vez pinta peor. ¿Y en serio van de víctimas?
#37 Me has puesto un negativo porque he defendido a las víctimas de este abuso, a las que llamas mentirosas. Has justificado el abuso y no es una suposición porque tus declaraciones están en este hilo público. Lo siguiente después de demostrar que eres un machista más será atacar mi libertad de expresión por defender a las víctimas, para esconder lo que has hecho, adelante, retratate. No has tardado nada. Machista