Hace 8 años | Por tiopio a es-us.noticias.yahoo.com
Publicado hace 8 años por tiopio a es-us.noticias.yahoo.com

Placas en español y mandarín señalizan una avenida comercial de La Paz. Esos ideogramas que pocos entienden son el signo más elocuente del desembarco de China en Bolivia con bienes, servicios y millonarios créditos. El presidente Evo Morales golpeó las puertas de Pekín para obtener multimillonarios créditos para obras en hidrocarburos, minería, telecomunicaciones, hidroeléctricas y carreteras y para potenciar las Fuerzas Armadas. Desde fines de la década pasada, ha contratado créditos por unos 2.600 millones de dólares.

Comentarios

D

Es una de las noticias mas absurdas que recuerdo haber leído ultimamente...

Azucena1980

Desembarco en un país sin salida al mar pero con una importante flota...una entelequia en sí misma

D

Toda América de México para abajo, una región extremadamente rica en todo tipo de recursos, es la mayor oportunidad de mercado e independencia económica que jamás haya perdido España en toda su historia.

Desde que los estadounidenses y los ingleses nos echaron de allí a patadas y extendieron la creencia de que éramos unos salvajes, no hemos vuelto a rascar bola. Han sido los yankis los que han "gestionado" todo aquello para explotarlo a su antojo y disfrute y sacarles hasta la última gota de sangre. Y ahora los chinos. Lo que está claro es que de España allí sólo queda el idioma, el Banco Santander y Telefónica.

D

#2 y el BBVA.

B

#2 Telefónica en Latinoamérica es como Microsoft en Europa, una lacra que se dedica a chupar la sangre de la gente.

D

Si el bienestar se ve , sin arruinar un pais como Bolivia ; el mas pobre del mundo durante decadas...


Las empresas chinas pueden movilizar 60.000 obreros ,un vez terminada la obra , se van a cumplir otros contratos.Algunos se quedan montan negocios, China les quedo pequeña.

privatizaron el agua, y Suez sin terminar las obras, queria cobrar por habitante , el 25% de sueldos muy bajos...lo que provoco la guerra del agua, querian prohibir recojer la lluvia.