Hace 7 años | Por lagarderd a cultura.elpais.com
Publicado hace 7 años por lagarderd a cultura.elpais.com

Creció en un orfanato de la Rumanía de Ceaucescu. Pudo acabar en el hampa, pero gracias a una profesora que le iluminó, emprendió la senda del compromiso social. Se llama a sí mismo activista. A día de hoy, Lagarder Danciu, 35 años, lo es en tres frentes: como okupa sin techo, como gay y como gitano. Ha saltado a cierta fama por reventar mítines políticos de todo signo: “Ya has tenido tu momento de gloria”, le han dicho desde el PP, el PSOE y Podemos. Pero él sigue viviendo en la calle para levantar conciencias y de paso, tiene línea directa co

Comentarios

derethor

AEDE es humillante

D

Gitano y gay, en la puta calle. Esto de los primero que habla es de su propia familia, a la que defendera como "colectivo gitano"