La agresión LGTBIfóbica del pasado domingo a un joven de 20 años en el barrio madrileño de Malasaña, a quien ocho encapuchados insultaron y grabaron con una navaja la palabra “maricón” en el glúteo, despierta la indignación de los ciudadanos y enciende la alerta roja del Ejecutivo y de los principales partidos del país.
#10:
Dadles micrófonos a los fascistas para que digan "cosas nazis" y luego justificad y blanquead lo que que dicen, dejadlo cocer a fuego lento y poco a poco tendremos un guiso rico rico, con sabor al que se comía la bisabuela por cojones.
#5:
Y encima los que lanzan los mensajes homófobos, después esconden la mano. Putos cobardes.
Se llama homofobia, que puta manía de inventarse palabras nuevas.
Lamentablemente no creo que se trate de ninguna nueva ola, agresiones de este tipo las ha habido siempre, pero en mi opinión ahora se están conociendo y denunciando públicamente más.
A la sociedad le queda mucho que avanzar. No me cabe en la cabeza que una persona odie a otra por su simple orientación sexual cuando debería ser algo que nos diera totalmente insignificante.
Las causas son muy simples y, como ocurre siempre en España, son obscenamente evidentes aunque jamás lo dirán sus medios (prácticamente todos): la derecha se ha desacomplejado y lleva 20 años implantando su agenda "social" mediante un rodillo político-mediático-judicial. Que se extendiesen las agresiones a rojos, homosexuales, inmigrantes, personas sin hogar, etc. era una simple cuestión de tiempo.
Nuestra postura contra el fascismo es la misma que la de los alemanes tras el ascenso al poder de Hitler: vemos como llegan, como suben, como vierten su odio contra determinados colectivos pero como no va con nosotros (por ahora) nos callamos y miramos a otro lado.
Dadles micrófonos a los fascistas para que digan "cosas nazis" y luego justificad y blanquead lo que que dicen, dejadlo cocer a fuego lento y poco a poco tendremos un guiso rico rico, con sabor al que se comía la bisabuela por cojones.
#9 Para ello gran parte de sus esfuerzos propagandísticos se centran en instalar que el enemigo siempre es un "otro". Con los inmigrantes lo tienen muy fácil porque ostentan nacionalidades, colores y credos que interpretamos inmediatamente como ajenos, pero con los gays tienen que esforzarse en tranquilizarte aclarando que el enemigo no es tu primo el sarasa del pueblo sino ese que muestra su desviada condición con orgullo y propala la perversa "ideología de género" pergeñada por las élites para destruir Occidente. Igualmente se han inventado un feminismo respetable (el de Ana Botín y el mito de las mujeres hechas a sí mismas sin subvenciones ni discriminaciones positivas) en contraposición al "feminazismo". En todas las tertulias sus voceros se afanan desde el minuto uno en realizar estas distinciones para habilitar la posibilidad de dirigir un odio químicamente puro contra los colectivos que marca la agenda de la extrema derecha.
#5 No sólo lanzan mensajes homófobos, sino que además responsabilizan a los inmigrantes de los resultados de esos mensajes y de todos los males de la sociedad. Combo de oferta.
#5 La derecha cavernícola ultracatólica lleva muchos años alentando y promoviendo la homofobia (ya vimos su rabiosa reacción en las calles contra el matrimonio homosexual, con los obispos a la cabeza). Ahora están recogiendo lo que sembraron. Y por si fuera poco, están consiguiendo lo inimaginable gracias a sus medios de propaganda: que la gente se trague el cuento de que la homofobia es culpa de los "progres" y de las víctimas, y que se vote en masa a los fascistas que prometen mano dura contra la violencia que esos mismos fascistas alientan cada día. Son los malditos intolerantes de siempre, los que destrozan la sociedad, la convivencia, y todo el país si hace falta, para luego venir disfrazados de salvadores y guardianes de las esencias. Y la gente se lo traga, joder, porque la educación democrática en este país ha sido y sigue siendo putopatética y no hay nada más fácil que engañar a los ignorantes.
Comentarios
Debe ser la quinta o sexta ola, ya he perdido la cuenta.
Las olas no se crean solas, suele haber algun tipo de influjo. Puede ser de la luna, saltando o incluso con la propia vox.
A veces añoro la Ley del Talión.
Se llama homofobia, que puta manía de inventarse palabras nuevas.
Lamentablemente no creo que se trate de ninguna nueva ola, agresiones de este tipo las ha habido siempre, pero en mi opinión ahora se están conociendo y denunciando públicamente más.
A la sociedad le queda mucho que avanzar. No me cabe en la cabeza que una persona odie a otra por su simple orientación sexual cuando debería ser algo que nos diera totalmente insignificante.
Y encima los que lanzan los mensajes homófobos, después esconden la mano. Putos cobardes.
Vaya, vaya...
Cuando hay una gran fobia hacía un grupo también hay un gran silencio...
Las causas son muy simples y, como ocurre siempre en España, son obscenamente evidentes aunque jamás lo dirán sus medios (prácticamente todos): la derecha se ha desacomplejado y lleva 20 años implantando su agenda "social" mediante un rodillo político-mediático-judicial. Que se extendiesen las agresiones a rojos, homosexuales, inmigrantes, personas sin hogar, etc. era una simple cuestión de tiempo.
Nuestra postura contra el fascismo es la misma que la de los alemanes tras el ascenso al poder de Hitler: vemos como llegan, como suben, como vierten su odio contra determinados colectivos pero como no va con nosotros (por ahora) nos callamos y miramos a otro lado.
Dadles micrófonos a los fascistas para que digan "cosas nazis" y luego justificad y blanquead lo que que dicen, dejadlo cocer a fuego lento y poco a poco tendremos un guiso rico rico, con sabor al que se comía la bisabuela por cojones.
#9 Para ello gran parte de sus esfuerzos propagandísticos se centran en instalar que el enemigo siempre es un "otro". Con los inmigrantes lo tienen muy fácil porque ostentan nacionalidades, colores y credos que interpretamos inmediatamente como ajenos, pero con los gays tienen que esforzarse en tranquilizarte aclarando que el enemigo no es tu primo el sarasa del pueblo sino ese que muestra su desviada condición con orgullo y propala la perversa "ideología de género" pergeñada por las élites para destruir Occidente. Igualmente se han inventado un feminismo respetable (el de Ana Botín y el mito de las mujeres hechas a sí mismas sin subvenciones ni discriminaciones positivas) en contraposición al "feminazismo". En todas las tertulias sus voceros se afanan desde el minuto uno en realizar estas distinciones para habilitar la posibilidad de dirigir un odio químicamente puro contra los colectivos que marca la agenda de la extrema derecha.
#5 No sólo lanzan mensajes homófobos, sino que además responsabilizan a los inmigrantes de los resultados de esos mensajes y de todos los males de la sociedad. Combo de oferta.
#5 La derecha cavernícola ultracatólica lleva muchos años alentando y promoviendo la homofobia (ya vimos su rabiosa reacción en las calles contra el matrimonio homosexual, con los obispos a la cabeza). Ahora están recogiendo lo que sembraron. Y por si fuera poco, están consiguiendo lo inimaginable gracias a sus medios de propaganda: que la gente se trague el cuento de que la homofobia es culpa de los "progres" y de las víctimas, y que se vote en masa a los fascistas que prometen mano dura contra la violencia que esos mismos fascistas alientan cada día. Son los malditos intolerantes de siempre, los que destrozan la sociedad, la convivencia, y todo el país si hace falta, para luego venir disfrazados de salvadores y guardianes de las esencias. Y la gente se lo traga, joder, porque la educación democrática en este país ha sido y sigue siendo putopatética y no hay nada más fácil que engañar a los ignorantes.
#10