El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó la semana pasada los datos sobre el padrón oficial de población a 1 de enero de 2018, que inciden sobre la sangría demográfica en la provincia de Salamanca. Y es que durante el último año perdió otros dos mil cuatrocientos habitantes y su población es similar a la que había en el año 1910.
Gran parte de los hijos de esos ancianos es la que nutrió las principales zonas industriales del país. En 15 años, decenas de pueblos van a desaparecer, en 30, aquello será un erial.
#1 El pueblo de mi madre es uno de esos con más del 50% de mayores de 65 años.
En los veranos nos juntábamos gente de Madrid, Bilbao, Salamanca y Barcelona más o menos por este orden. Prácticamente no quedó ninguno en la comarca.
En su día tuvo ferrocarril (en Lumbrales) y los saltos hidroeléctricos (Saucelle, Aldeadávila) necesitaban más mano de obra. Ahora lo único que queda para generar empleo es una mina de wolframio reabierta en Barruecopardo y algo de turismo rural.
#2 El de mi padre, en el sur de Tarragona y con unos 300 habitantes iba por el mismo camino.
La Generalitat creó el Incavi (Institut Catalá del Vi) y empezó a dar cursos y subvenciones para mejorar los procesos del vino. Al principio solo fue la cooperativa. Durante años parecía que nada podía pararlo hasta que de repente hubo un boom de empresas vinícolas y de reputación del vino del Priorat y todos los pueblos empezaron a ganar gente y de todas las edades.
Ahora podemos decir que está lejos de ser una comarca muerta. Y gracias al vino. El pueblo es Gratallops.
Comentarios
#4 El de lo míos tiene un Castro vetón (cultura celta) y en alguna casa hay piedra con triskeles e inscripciones.
Uno de los mejores conservados y la zona es parque natural.
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Vetones
http://vivelasarribes.es/cascadas-y-otros/castro-el-castillo.html
#5 Hace un par de días salió la zona en Comando Actualidad de RTVE.
https://www.facebook.com/SalamancaVivelaProvincia/posts/226601608089064
El turismo rural parece que al menos está revitalizando la zona.
Y los vinos de las arribes, por ejemplo "El secreto del Vetton", no están mal.
#6 Me lo apuntó. Nunca he ido al Pozo de los Humos.
#8 En toda la Ribera del Duero hay bastante gente atada al sector, pero esa zona no está exactamente en la Ribera (a unos 30 km Vitigudino).
Y toda la provincia e incluso la ciudad de Salamanca ha perdido mucha población:
https://www.tribunasalamanca.com/noticias/dos-decadas-de-despoblacion-salamanca-tercera-capital-de-espana-que-mas-habitantes-ha-perdido/1515501343
Gran parte de los hijos de esos ancianos es la que nutrió las principales zonas industriales del país. En 15 años, decenas de pueblos van a desaparecer, en 30, aquello será un erial.
#1 El pueblo de mi madre es uno de esos con más del 50% de mayores de 65 años.
En los veranos nos juntábamos gente de Madrid, Bilbao, Salamanca y Barcelona más o menos por este orden. Prácticamente no quedó ninguno en la comarca.
En su día tuvo ferrocarril (en Lumbrales) y los saltos hidroeléctricos (Saucelle, Aldeadávila) necesitaban más mano de obra. Ahora lo único que queda para generar empleo es una mina de wolframio reabierta en Barruecopardo y algo de turismo rural.
#2 Lo mismo el pueblo de mis abuelos (justo lo nombras)
#2 El de mi padre, en el sur de Tarragona y con unos 300 habitantes iba por el mismo camino.
La Generalitat creó el Incavi (Institut Catalá del Vi) y empezó a dar cursos y subvenciones para mejorar los procesos del vino. Al principio solo fue la cooperativa. Durante años parecía que nada podía pararlo hasta que de repente hubo un boom de empresas vinícolas y de reputación del vino del Priorat y todos los pueblos empezaron a ganar gente y de todas las edades.
Ahora podemos decir que está lejos de ser una comarca muerta. Y gracias al vino. El pueblo es Gratallops.
El viejo oeste...