El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Almería, Joaquín Pérez de la Blanca, ha asegurado este viernes que se ha “visto obligado a abandonar” la formación a la que se afilió en enero de 2014 debido a los “profundos y tremendos cambios” que se han producido “en el último año” en el partido que lidera Santiago Abascal.“Ha sido una decisión tremendamente difícil, no repentina sino reflexionada, llevo varios meses madurándola” y ha afirmado que, en las actuales circunstancias,“se le hace imposible trabajar”.
Comentarios
Vaya, quién iba a pensar que un partido de extrema derecha iba a ser autoritario.
#4 Deberia ponerlo en las papeletas:
- "Puede contener trazas de franquismo y extremismo"
#4 jajajaja...92%...o más ,por cierto, de consenso... ni el Cielo quieren tanto a Dios...
“una excesiva rigidez en la toma de decisiones” es, hablando en plata, lo que manden los cojones del El Paguitas.
Noticias como esta son esperanzadoras....
Este lo que pasa que es un rojo. A por él.
Estuvo contagiado de coronavirus y además en el pasado estuvo en Ciudadanos.
En Vox hay mucha gente que se metió por que querían un partido conservador y españolista, lo cual no significa lo mismo que ser filofascista ni tampoco significa que vayan a apoyar eternamente el discurso del partido.
#6 querían un partido Nacional Catolicista.
Pues se siente, funcionan así.
Si ahora Vox resulta que es el máximo defensor del colectivo LGTB... claro, habrá señores que lo lleven mal.
Lo mismo pensaba que solo iban a salir a dar palizas a chavales, maricones y algún que otro inmigrante que fuese solo como vienen siendo sus costumbres...
Con la de motos que vendieron ...,
Ahora que para mí el único culpable del auge de los Voxgolos es en concreto el nacionalismo catalán
Si bien es cierto que cada vez había más independentistas por declaraciones de la derecha esto era recíproco por declaraciones independentistas
Al final se han creado dos ideas que están más cerca y próximas de lo que ellos piensan
#9 No sólo por el independentismo. Súmale la deriva feminista.
En VOX al que discrepa le mandan a la puta calle