El Parque Nacional Komodo, en Indonesia, es la mayor reserva mundial de dragones de Komodo, una especie en peligro de extinción pero que despierta un gran interés por sus increíbles peculiaridades. Las autoridades indonesias, conscientes de ese reclamo, han decidido crear un gran proyecto turístico que no ha gustado a todo el mundo. Ese parque nacional está declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que es escéptica sobre los supuestos beneficios que podría traer el proyecto.
Comentarios
Se sabe si repararán en gastos?
A ver, hay que entenderlos, que alimentar a los dragones cuesta una pasta y los turistas son una buena fuente de proteínas.
Sin la UNESCO pero también sin dinosaurios, ¿no? Pues vaya
Spoiler: va a salir mal.
El turismo es un cancer. Parece que todo vale.