Los homosexuales represaliados durante la dictadura franquista están a la espera de recibir las indemnizaciones que se aprobaron en los presupuestos generales de este año, a iniciativa del grupo parlamentario de IU-ICV. Mientras tanto, este fin de semana el Foro por la Memoria de Madrid ha celebrado unas jornadas para recordarles.
yo si fuera ellos preferiria que se gastaran ese dinero en una serie de actos para dar a conocer a la opinion publica las barbaries que se hacian con ellos, preferiria mas reparo moral y social que economico, pero quizá por el tipo de sociedad en el que vivimos, aqui lo que prima es el dinero.
Nunca parto una lanza a favor del franquismo o contra los homosexuales, y quizás por eso hasta me da pudor verter una reflexión como esta: ¿el culpable de la situación de los homosexuales de entonces es el franquismo o la sociedad de entonces? Porque mucho me temo que el Gobierno va a pagar por algo que propició el vecino de enfrente y el de al lado y el de más allá, y preferiría que ese dinero se destinara a otras cosas. Pero si finalmente se les paga, ya puestos, indemnicemos a las madres solteras de entonces y sus hijos, que la moral de la época les hacía vivir poco menos que en la ignonimia, gracias al nacionalcatolicismo imperante.
Comentarios
yo si fuera ellos preferiria que se gastaran ese dinero en una serie de actos para dar a conocer a la opinion publica las barbaries que se hacian con ellos, preferiria mas reparo moral y social que economico, pero quizá por el tipo de sociedad en el que vivimos, aqui lo que prima es el dinero.
#2 Si te leyeras la noticia verías que las indemnizaciones son para personas encarceladas simplemente por ser homosexuales
#3, un patazo descomunal el mío en #2
Nunca parto una lanza a favor del franquismo o contra los homosexuales, y quizás por eso hasta me da pudor verter una reflexión como esta: ¿el culpable de la situación de los homosexuales de entonces es el franquismo o la sociedad de entonces? Porque mucho me temo que el Gobierno va a pagar por algo que propició el vecino de enfrente y el de al lado y el de más allá, y preferiría que ese dinero se destinara a otras cosas. Pero si finalmente se les paga, ya puestos, indemnicemos a las madres solteras de entonces y sus hijos, que la moral de la época les hacía vivir poco menos que en la ignonimia, gracias al nacionalcatolicismo imperante.