La Guerra Italo-Turca estalló entre Italia y el Imperio Otomano el 29 de septiembre de 1911. A finales del siglo XIX, Italia se quedó con sabor amargo tras la conferencia de Berlín. Las principales potencias europeas como Francia, Reino Unido y Alemania se habían repartido la práctica totalidad del continente africano, mientras que Italia, a excepción de Eritrea y parte de lo que hoy es Somalia, se quedó a las puertas de realizar su ansiado imperio italiano.
Comentarios
Los aficionados a los cómics de Corto Maltés seguro que conocéis esta guerra porque figura en la maravillosa introducción de Hugo Pratt al volumen La casa dorada de Samarkanda.
Muy bonito artículo, pero ha puesto, con todos sus cojonazos, deducieron. No existe. Es dedujeron. Eso hace, para mí, que el artículo pierda muchísimo valor y brillo.
Sí, soy un gramanazi.
Luego Italia se cargó un tercio de la población de Libia. Qué grandes tiempos aquellos.
Choque de imperios.
#4 Más bien entre un imperio moribundo y un pretendiente a imperio.
Interesante participación de Italia en la carrera imperialista tras la conferencia de Berlín.