Incluso en la época de los presidentes de puro y abrigo, que se lanzaban dardos durante la semana para hacer las paces en una comilona sabatina, la mordacidad de Cabeza sorprendía
La hostia la entrevista. P. Pues al lío: ¿cómo llegó usted a ser presidente del Atlético de Madrid?
R. Fue en una cena con amigos. Acababa de dimitir Vicente Calderón y me dijeron, en broma, que me presentase a las elecciones. Y yo dije que sí, que estaría bien, sin ninguna intención de hacerlo. Pero sucedió que uno de los camareros que lo escucharon se lo dijo a un redactor de ‘Pueblo’ y al día siguiente salió publicado. Por la mañana, La Paz estaba hasta arriba de periodistas preguntándome por el asunto y yo seguí vacilando y diciendo que sí, que me presentaba. Al final, la bola fue creciendo y, cuando me quise dar cuenta, ya era casi presidente, porque los otros candidatos no fueron capaces de reunir las firmas necesarias.
#2 la verdad es que es un personaje curioso. Parece mentira que haya recibido tantos tratos de favor con la personalidad que tiene. Seguramente se fije mejor en a dónde dispara de lo que parece.
P. Usted vive unos meses al año en Murcia, en La Manga del Mar Menor, ¿verdad?
R. Sí, yo estoy enamorado de La Manga. Solo tiene un gran problema: que hay murcianos.
Comentarios
La hostia la entrevista.
P. Pues al lío: ¿cómo llegó usted a ser presidente del Atlético de Madrid?
R. Fue en una cena con amigos. Acababa de dimitir Vicente Calderón y me dijeron, en broma, que me presentase a las elecciones. Y yo dije que sí, que estaría bien, sin ninguna intención de hacerlo. Pero sucedió que uno de los camareros que lo escucharon se lo dijo a un redactor de ‘Pueblo’ y al día siguiente salió publicado. Por la mañana, La Paz estaba hasta arriba de periodistas preguntándome por el asunto y yo seguí vacilando y diciendo que sí, que me presentaba. Al final, la bola fue creciendo y, cuando me quise dar cuenta, ya era casi presidente, porque los otros candidatos no fueron capaces de reunir las firmas necesarias.
#1 El tío no se corta un pelo.
#2 la verdad es que es un personaje curioso. Parece mentira que haya recibido tantos tratos de favor con la personalidad que tiene. Seguramente se fije mejor en a dónde dispara de lo que parece.
P. Usted vive unos meses al año en Murcia, en La Manga del Mar Menor, ¿verdad?
R. Sí, yo estoy enamorado de La Manga. Solo tiene un gran problema: que hay murcianos.
"Tronchamozas" me la apunto para cuando tenga que insultar a alguien en algún duelo al amanecer