Hace 2 años | Por JohnnyQuest a vitake.net
Publicado hace 2 años por JohnnyQuest a vitake.net

Este can era un alano español, una raza de presa con origen en nuestro país y que proviene del cruce entre el dogo y el mastín. Es una raza musculosa y corpulenta con unas características orejas de pequeño tamaño. El amo de Becerrillo fue Alonso de Salazar, descubridor de las islas Marshall y sorprendió desde el primer momento a los nativos sudamericanos debido a su fiereza, lo que difería notoriamente del resto de perros ya existentes en aquel continente.

Comentarios

MaKaNaS

"Solo quiere jugar" decía Alfonso de salazar cuando lo soltaba a cazar indígenas...

Guanarteme

"Héroe" dice, un puto arma de guerra es lo que era.... ¡Míralo ahí haciendo universidades, proclamando las leyes de indias y salvando almas! Si llega a haber sido un perro inglés fijo que mandaba a los indígenas a reservas sin mestizarlos ni nada pero Hollywood hubiera hecho una peli de él.

A ver, lo que siempre digo: "no somos responsables de la historia, pero sí del tono con que la contamos".

D

Menuda salvajada 😰

D

Creo haber leído que estos perros, o mejor dicho sus dueños recibían una paga incluso mayor que un soldado de infantería.
Creía que esta raza ya no existía, pero por la foto del artículo veo que goza de buenas mandíbulas.

themarquesito

#2 Por Becerrillo cobraba su dueño, a mayores de su ordinaria paga, el sueldo de un ballestero. Aquí lo que cuenta Fernández de Oviedo sobre el famoso perro Becerrillo o Becerrico, padre del igualmente formidable Leoncico:

Porque no solamente los hombres deben ser loados e gratificados conforme a sus virtudes y méritos, pero aun de los brutos animales os enseñan (los que bien han escripto), que es razón e cosa nescesaria, y no para olvidar, lo que algunos han fecho; porque, demás de nos maravillar de lo que fuere digno de admiración e pocas veces visto u oído, es grande la culpa que resulta de lo tal a los hombres de razón, cuando no hacen lo que deben, pues que los brutos animales se diferencian e aventajan en las virtudes e cosas que obran, y aun algunos hombres sobrepujan en buenos actos y hazañas. ¿Qué más vituperio puede ser para un cobarde que ganar sueldo una bestia entre los hombres, e dar a un perro parte y media, como a un ballestero? Este fué un perro llamado Becerrillo, llevado desta isla Española a la de Sanct Joan, de color bermejo, y el bozo, de los ojos adelante, negro; mediano y no alindado; pero de grande entendimiento y denuedo.

p

Ya me imagino a alguno preguntándole al dueño " ¿Muerde? Y la respuesta " sí, pero suelta".