En la última planta del edificio de la Cadena SER hay una sala para comer con máquinas de venta automática, donde lo mismo ves a uno de mantenimiento aplicándose unos donettes como a Javier del Pino apretándose un phoskito. Yo subo a diario porque mezclan los dos productos esenciales de la dieta mediterránea original: zumo de naranja y bollería industrial. Estas máquinas son claramente caprichos que Jesucristo nos ha concedido, pero a veces fallan.
Comentarios
#0 Ale, te voto positivo por las notas que publicaste el otro día.
Es un pos superdivertido. Yo he votado positivo aunque os cebéis.
fake fijaos en las horas de los mensajes, no coinciden