Se desconoce todavía el orígen exacto del vendaje de los pies en China pero, más o menos verídica la leyenda, se sabe que las primeras que empezaron a vendar sus pies fueron las bailarinas de palacio en el siglo X, con el objetivo de realzar la gracia de sus movimientos.
Pues menos mal que se ha perdido...Y también podria perderse la ablación de clitoris, la extirpación de prepucio por parte de sacerdotes-curanderos, y otras tantas burradas físicas.
Bufff... Dolor crónico toda la vida, tu propia madre partiéndote cuatro dedos... Sé que los orientales tienen mucha autodisciplina, pero creo que se pasan. A mí mi madre me parte cuatro dedos para hacerme el pie más pequeño y me falta tiempo para quitarme las vendas y llorar, berrear y patalear hasta que me curen como es debido.
En una revista, una mujer de unos cuarenta años se quejaba de que cuando vinieron malos tiempos lo pasaron mal porque su madre no podía trabajar. Si no podía casi andar, trabajar menos aún. Y claro, la familia lo pasó mal, porque el problema de mutilar a una persona es que si llega un momento en que necesite valerse por sí misma, no puede. Qué burrada.
Comentarios
Pues menos mal que se ha perdido...Y también podria perderse la ablación de clitoris, la extirpación de prepucio por parte de sacerdotes-curanderos, y otras tantas burradas físicas.
Amén a #2
Yo os lo diré, por si la mujer se escapaba de casa, no pudiera ir demasiado lejos.
Bufff... Dolor crónico toda la vida, tu propia madre partiéndote cuatro dedos... Sé que los orientales tienen mucha autodisciplina, pero creo que se pasan. A mí mi madre me parte cuatro dedos para hacerme el pie más pequeño y me falta tiempo para quitarme las vendas y llorar, berrear y patalear hasta que me curen como es debido.
En una revista, una mujer de unos cuarenta años se quejaba de que cuando vinieron malos tiempos lo pasaron mal porque su madre no podía trabajar. Si no podía casi andar, trabajar menos aún. Y claro, la familia lo pasó mal, porque el problema de mutilar a una persona es que si llega un momento en que necesite valerse por sí misma, no puede. Qué burrada.
Dupe: Lotos Dorados: La tradición de los pies vendados
Lotos Dorados: La tradición de los pies vendados
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