Un padre apuñalado, una madre y una hermana en paradero desconocido y una orden judicial que le obliga a regresar a su antigua tierra, en Sierra Leona, a pesar de residir en Inglaterra desde 2003. Así es la vida del joven Alhassan Bangura, 19 años. Juega al fútbol en el Watford, un equipo de segunda división, y su condición de refugiado carece ya de validez en el país de acogida. "Allí no estaré a salvo. Si vuelvo, algo me pasará, alguien me acuchillará" -Declaró Alhassan.
Comentarios
La Justicia es ciega... además sorda y muda.
vaya tela
en realidad el chico tenia un salvoconducto para estar en inglaterra hasta un determinado dia, el chico acaba de tener un hijo pero se le ha acabado el tiempo y tiene que volver... es una pena pero no es el unico caso vamos, ese chico es un ejemplo de lo mas positivo que puede pasar asi que no se de que nos alarmamos
Putas fronteras. Puta burocracia. Puto "primer mundo".
No lo entiendo... por delante de la legislación está siempre la razón, o la lógica. Si hablaramos de un chico que no se ha integrado o de alguien que puede volver a la normalidad a su país, podría ser menos flagrante... pero en este caso...
Es la sociedad que nosotros creamos.
Fijo que le fichan en algún otro país de la UE en el mercado de invierno
Ya hay estafadores del 419 aprovechandose del caso para estafar dinero enviando mails supuestamente en su nombre.
Al juez lo mandaba yo a Sierra Leona
#9 jajajaja