Cientos de camboyanos son esclavizados cada año tras ser vendidos a barcos de pesca tailandeses, en los que trabajan sin cobrar, a veces durante años, constantemente amenazados de muerte por parte de sus explotadores. La mayoría de las víctimas procede de las zonas rurales míseras, y cae en las redes de tráfico de personas al creer en la promesa de un trabajo remunerado como obrero de la construcción o en las fábricas de Tailandia.
Comentarios
Hasta donde llega la avaricia.
A perro flaco todo son pulgas.
#1 Hasta el infinito y más alla :(.
Y lo mismo hace estados unidos con el resto de habitantes en áfrica.