En 2006 me pusieron en venta.Desde entonces he pasado ya por cuatro agencias inmobiliarias. 20 meses después, sigo con el cartel de SE VENDE.La diferencia es que ahora en vez 660.000 euros, como al principio, mi dueña me vendería por 480.000 —pese a que pida 590.000—.Tengo casi 100 m2. Exterior,dos balcones y un mirador.Dos dormitorios, un salón amplio, cocina y baño. Me reformaron hace unos años, estoy como nuevo y vendo estilo.Pues me venden nada menos que por 95 millones de las antiguas pesetas.¿Qué está pasando si yo sigo siendo el mismo?
Comentarios
No daría un céntimo por vivir en la ciudad.
a lo mejor es que no vales 660.000 euros. Y seguramente tampoco vales 480.000.
Cuando esté dispuesta a aceptar 90.000 € escríbame a buscopisovarato@hot
Gracias por adelantado
dedicado a los burbus añejos como yo mismo
Creo que ya lo he contado aquí... Hace poco estuve con un promotor que se quejaba de que le regateaban decenas de miles de euros. Pobrecico
Y con otro miembro de la industria de la construcción que, sorprendido, decía que si la gente alquilaba la industria no podría sostenerse.
Ay, las consecuencias de confundir "valor" con "precio"...
Igual lo compran a un precio justo.