El SPF o Factor de Protección Solar nos indica el tiempo que el protector aumenta la capacidad de nuestra piel para exponerse al sol sin quemarse. Se debe elegir en función de nuestro tipo de piel, la climatología, la hora de exposición y el índice ultravioleta (UVI).
Comentarios
Es el número de veces que multiplica el tiempo de exposición natural al sol.
En una frase, no merece la pena perder más tiempo.