«Meditaciones» fue el legado estoico que nos dejó Marco Aurelio. Una obra maestra en la que el emperador romano se escribía a sí mismo para forzarse a ser mejor ciudadano, mejor emperador y, sobre todo, mejor persona. De hecho, es con esta y no otra la intención con la que hay que leerlo. He cometido el error de leer este tratado con otra óptica, la de pensar que la escribe para los demás. Sin embargo, como realmente me impactó fue cuando lo leí desde el punto de vista que más sentido tiene (...) se está hablando a sí mismo
Comentarios
También recomendabilísimos los Ensayos de Montaigne, en gran medida heredero filosófico de Marco Aurelio (y que han rectualizado genios como los de Animalario con obras teatrales como "Las últimas palabras de Copito de Nieve". Muy necesarias sus reflexiones para el individuo y para los asuntos de la polis (política), tan carente de espíritu crítico y de nuevas estrategias (apoyadas en sabias y antiguas lecciones como estas)
Un libro magnífico. Grandes consejos. No puedo evitar pensar que siendo emperador de Roma es muy fácil llevar una estoica y austera existencia.
La austeridad se vuelve jodida cuando no llegas a fin de mes.
– Ama, admite el pequeño oficio (Augustus imperator) que aprendiste, y pasa el resto de tu vida sin convertirte en tirano ni en esclavo de ningún hombre.