Publicado hace 9 años por conversador a hominidas.blogs.quo.es

Una mujer tuvo el extraordinario privilegio de tener una tumba hace 18.000 años, en un momento en que nuestros antepasados raramente enterraban a sus muertos. Una tumba, un ritual, una lapida que indicaba que allí, bajo las losas de piedra, yacía una mujer, y flores, flores amarillas que impregnaron el lecho de polen. La enterraron dos veces, tuvo dos funerales.¿Quién era? ¿Por qué la enterraron dos veces? ¿Quién le llevó flores? ¿Por qué pintaron sus huesos? ¿Por qué fue una mujer la merecedora de algo tan excepcional entonces como un ritual

Comentarios

D

El tamaño de un tumba suele ser proporcional a lo hijo puta que fue su dueño en vida.

aunotrovago

Miradme, qué guapa soy y que bien me sienta posar en una tumba de 18000 años. Y soy arqueóloga. Hazme una foto!.

B

¿La Dama de Rojo? ¿La que viene cada ves? Y cuidado si no viene.