Palomitas y refresco, refresco y palomitas. Una pareja tan asociada al cine como el Gordo y el Flaco. Muchos no se pueden imaginar una sesión de tarde sin echarse a la boca estas delicias que han sobrevivido a todo tipo de hábitos de consumo. Sin embargo, en algunos países, las palomitas tienen que compartir espacio con aperitivos locales, a veces disparatados para un occidental.
He estado montones de veces en Colombia. Lo de las hormigas culonas es propio de un par de regiones concretas y nada que ver con lo que dice el artículo de amplia aceptación en el país.
Comentarios
#7 ni de este planeta, ese idioma sólo se habla en algún remoto planeta
En México te dan la posibilidad de bañar las palomitas en salsa de chile 😋
Bien picante.
¿Cines?, ¿qué es un cine?
He estado montones de veces en Colombia. Lo de las hormigas culonas es propio de un par de regiones concretas y nada que ver con lo que dice el artículo de amplia aceptación en el país.
#3 Si te pones mirando al norte, cualquiera que esté a tu izquierda
Regaliz salado en Holanda.
Luego dicen de los japonenses pero estos si que son raros.
¿Qué es un occidental?
#5 Eso explica que los holandeses no sean occidentales.
Morros de alondra, pezones de nutria...cómanlos mientras están calentitooooos
Palomitas a 4 euros y refresco a 2,50... a parte de la entrada que está por encima de los 7 euros. Haz números sabiendo que nunca vas al cine solo.
Nachos con pseudoqueso, en algunos cines de Madrid.
Siendo bebedores de Mahou y fumadores de Fortuna, no debería sorprenderme, la verdad.