A veces, a los periodistas nos jode mucho que ciertas cosas carezcan de rareza. Termino la entrevista con 3 personas con altas capacidades (lo que llamamos superdotados) en un bar de Alicante. Ellos se quedan dentro: «Ahora es cuando vamos a hablar de política nacional», bromea uno. Yo salgo. En el umbral de la puerta, me giro buscando lo extraordinario ya de un modo absurdo y desquiciado: esperando, no sé, que jueguen a hacer levitar las tazas de café o cualquier otra locura; esperando, en fin, que su normalidad sea un engaño premeditado.
Comentarios
karmo
#1 a mi no me ha llamado nadie
#3 Te faltan padrinos para llegar a la fama
a ver si me llaman algún día
Yo, lo normal, 24 cm
#4 Sabes que no se mide desde el agujero del culo, ¿verdad?
#6 Ya, ya... De todas formas no me dejarían medirlo así los huevos
Articulo muy interesante y ajustado a la realidad.
Hay que decir que tener un cociente superior al 98% tampoco es tan raro... uno de cada 50 lo cumple.
en un bar de Alicante. Ellos se quedan dentro: «Ahora es cuando vamos a hablar de política nacional»
Con eso de estar en un bar, seguro que más de uno les diría que son unos cuñados si las ideas que dicen no le gustan.
¿Hay superdotados en la tele?