Los catedráticos José Luis del Corral y Antonio Piñeiro convierten la historia del cristianismo en un relato vivo. Basándose en una investigación exhaustiva, reconstruyen el papel político de Jesucristo como revulsivo para el poder de los romanos. Ese es el hilo conductor de la novela El trono maldito.
#1#2 Literatura fantástica. Personalmente me gustó más la primera parte que tenía más acción. En la segunda aparecen un par de zombies pero ni siquiera se comen a nadie
¿Jesucristo? ya... Lo que realmente pasó en Roma es que algún asesor lumbreras comprendió que el monoteismo es un sistema de control de masas mucho más eficaz que el politeísmo.
¡ Hombre, tanto como muy tranquilo, no ¡
Tranquilo nunca lo estuvo, eran una máquina de guerra, como lo son hoy los EEUU, que tenian que mantener el orden en un enorme imperio, día a día.
Jesucristo fue una pequeña molestia que les importaba un bledo, de hecho, accedieron a cargárselo por la presión del "PP Israelita" de entonces, apoyado por la "Iglesia" de entonces, los sacerdotes judíos a quienes Jesucristo si que les hacía pupa.
Vamos, nada nuevo bajo el sol.
El imperio romano no estaba tranquilo ni antes ni después de Jesucristo. La diferencia entre la violencia y las matanzas es nula, y depende más bien de otros factores.
Pero es que además, me gustaría saber de dónde cojones sacan estos tíos que Jesucristo o lo que hayan venido a poner en su boca dice, en alguna parte, que todos somos iguales. No dice tal cosa ni aparece tal cosa nunca. Como mucho, todo lo más, una especie de "todos somos iguales a los ojos de Dios", pero jamás dijo nada de igualdad social (ni digamos ya de abolir la esclavitud, nunca se planteó tal cosa), todo lo contrario, el cristianismo paulino es totalmente clasista y estamental. De iguales, hostias. El de abajo sigue abajo y el de arriba sigue arriba, la idea de igualdad aún le faltaba algo más que un hervor para lo que se consumía en la época.
El cristianismo avanzó por la propia corrupción de las instituciones romanas. Cuando un nicho se despuebla, aparece algún elemento oportunista que lo ocupa, le basta con tener las características requeridas. De hecho, hablar del "cristianismo", así, en plan monolítico, es otra coña marinera. El "cristianismo" hasta el año 300 era una muchedumbre de corrientes y sectas que se parecían unas a otras como el día y la noche (los gnósticos eran la repolla, particularmente), y por supuesto se llevaban como el culo, a matar literalmente no pocas veces. El moribundo estado romano escogió la que más le convenía y, con su ayuda, exterminaron el resto de corrientes del mapa.
Esto es otra cosa que acabó con el mundo romano y que aparece y desaparece en la historia: esa búsqueda enfermiza de la pureza y la uniformidad. Suele acabar como el imperio romano.
Y por cierto, el cristianismo deglutió muchísimos más elementos de la cultura grecorromana que viceversa. Ese palabro llamado "judeocristiano" no tiene ni pies ni cabeza, en realidad es "cristianorromano", por ejemplo la moral (impuesta desde el poder) de la época augústea era rancia como ella sola y sin nada que envidiar a los victorianos, y todavía no andaban los cristianos en circulación.
Si, debian de estar la hostia de preocupados por ...¿como dice que se llama ... Jesús? ... ¡ah! pues mira no hay un solo escrito de un solo escritor o politico romano que mencione ese nombre ... ¡la hostia en verso de preocupados debian estar!
Comentarios
#1 #2 Literatura fantástica. Personalmente me gustó más la primera parte que tenía más acción. En la segunda aparecen un par de zombies pero ni siquiera se comen a nadie
#1 ¿ciencia?
"Esta historia comienza hace cuatro mil años. El rey de Israel, Herodes I El Grande, acaba de morir".
O sea, que es una historia de ciencia-ficción.
#2 Ciencia-ficción, por lo de estar ambientada en el futuro.
Y eso que Espartaco ha salido incontable veces en el cine.
¿Jesucristo? ya... Lo que realmente pasó en Roma es que algún asesor lumbreras comprendió que el monoteismo es un sistema de control de masas mucho más eficaz que el politeísmo.
Pelo largo,pelo en barba ,diciendo que todos somos iguales,usa ropa alcampo, en contra de la casta y lo quieren crucificar . (ealo ahí)
¡ Hombre, tanto como muy tranquilo, no ¡
Tranquilo nunca lo estuvo, eran una máquina de guerra, como lo son hoy los EEUU, que tenian que mantener el orden en un enorme imperio, día a día.
Jesucristo fue una pequeña molestia que les importaba un bledo, de hecho, accedieron a cargárselo por la presión del "PP Israelita" de entonces, apoyado por la "Iglesia" de entonces, los sacerdotes judíos a quienes Jesucristo si que les hacía pupa.
Vamos, nada nuevo bajo el sol.
El imperio romano no estaba tranquilo ni antes ni después de Jesucristo. La diferencia entre la violencia y las matanzas es nula, y depende más bien de otros factores.
Pero es que además, me gustaría saber de dónde cojones sacan estos tíos que Jesucristo o lo que hayan venido a poner en su boca dice, en alguna parte, que todos somos iguales. No dice tal cosa ni aparece tal cosa nunca. Como mucho, todo lo más, una especie de "todos somos iguales a los ojos de Dios", pero jamás dijo nada de igualdad social (ni digamos ya de abolir la esclavitud, nunca se planteó tal cosa), todo lo contrario, el cristianismo paulino es totalmente clasista y estamental. De iguales, hostias. El de abajo sigue abajo y el de arriba sigue arriba, la idea de igualdad aún le faltaba algo más que un hervor para lo que se consumía en la época.
El cristianismo avanzó por la propia corrupción de las instituciones romanas. Cuando un nicho se despuebla, aparece algún elemento oportunista que lo ocupa, le basta con tener las características requeridas. De hecho, hablar del "cristianismo", así, en plan monolítico, es otra coña marinera. El "cristianismo" hasta el año 300 era una muchedumbre de corrientes y sectas que se parecían unas a otras como el día y la noche (los gnósticos eran la repolla, particularmente), y por supuesto se llevaban como el culo, a matar literalmente no pocas veces. El moribundo estado romano escogió la que más le convenía y, con su ayuda, exterminaron el resto de corrientes del mapa.
Esto es otra cosa que acabó con el mundo romano y que aparece y desaparece en la historia: esa búsqueda enfermiza de la pureza y la uniformidad. Suele acabar como el imperio romano.
Y por cierto, el cristianismo deglutió muchísimos más elementos de la cultura grecorromana que viceversa. Ese palabro llamado "judeocristiano" no tiene ni pies ni cabeza, en realidad es "cristianorromano", por ejemplo la moral (impuesta desde el poder) de la época augústea era rancia como ella sola y sin nada que envidiar a los victorianos, y todavía no andaban los cristianos en circulación.
Si, debian de estar la hostia de preocupados por ...¿como dice que se llama ... Jesús? ... ¡ah! pues mira no hay un solo escrito de un solo escritor o politico romano que mencione ese nombre ... ¡la hostia en verso de preocupados debian estar!