El Premio Nobel de Química 2025 ha sido otorgado al desarrollo de las Estructuras Metal-Orgánicas (MOF), una tecnología capaz de capturar dióxido de carbono del aire, generar agua potable en el desierto, almacenar hidrógeno limpio y liberar fármacos con precisión quirúrgica. Estas “esponjas moleculares” no son solo un hito químico: podrían convertirse en una de las infraestructuras invisibles más transformadoras del siglo XXI, abriendo un puente entre energía, inteligencia artificial, computación cuántica y el tecnohumanismo de Mujica.
|
etiquetas: computación cuántica , inteligencia artificial , tecnohumanismo
Venga ya cierro y me voy, por obvio.
Esperemos su aplicación y funcionamiento masivo
señalyruido.com/?p=3309