Esa actitud de repliegue reformista se justifica con el argumento de conseguir una intervención real en la vida política, sobre una teoría de etapas y gradualizaciones en una vía de reformas, que lo que logran es un resultado negativo al tender este reformismo sin meta, producir en los activistas una pérdida de voluntad y perspectiva de cambio real y, sobre todo, la neutralización decepcionada de un sector popular que tenderá a quedar en disposición de sucumbir a demagogos alegatos de carácter reaccionario.
Comentarios
Relacionada:
Del cinturón rojo al cinturón naranja: así se ha adueñado Ciudadanos de los barrios obreros catalanes
Del cinturón rojo al cinturón naranja: así se ha a...
magnet.xataka.comChorrada de público en pendientes.
Para el ignorador del comentario 2
"Chorrada" pero bien que sueltas tu voto negativo censor, aparte de tu comentario trol.