Los hechos sucedieron la pasada semana cuando llamó a la tienda un hombre que decía pertenecer a la Plataforma Patriótica Millán-Astray. Preguntó por el encargado y cuando la encargada se identificó como la misma, el individuo advirtió que le había ofendido un libro que tenía en el escaparate
Comentarios
¿No se reserva el derecho de admisión en estos sitios?
El tío a la puta calle y llamando a la policía por amenazas
¿Estos son los ofendiditos de los que tanto se habla?