José D’Assunçao Ferreira, un ciudadano portugués hijo de un exiliado extremeño tras el golpe del 36, visita la tumba de su padre en Barrancos (Portugal) tras adquirir la nacionalidad española por la Ley de Memoria.
Considerando el criterio voxarra de utilizar el consumo de jamón para cuantificar la españolidad de alguien, podríamos decir que es un presunto español.
Bonita historia. Pero habría que hacer algunas matizaciones a algunos detalles burocráticos. Si Samuel obtuvo la nacionalidad portuguesa tan rápido es porque su madre en ese momento sí tenía la nacionalidad portuguesa. A diferencia de José, cuyo padre lamentablemente tuvo que renunciar a ella y por eso el hijo tuvo que esperar a la nueva ley.
Comentarios
Considerando el criterio voxarra de utilizar el consumo de jamón para cuantificar la españolidad de alguien, podríamos decir que es un presunto español.
#2 En italiano sería un prosciutto español
Mi más sentido pésame
Bonita historia. Pero habría que hacer algunas matizaciones a algunos detalles burocráticos. Si Samuel obtuvo la nacionalidad portuguesa tan rápido es porque su madre en ese momento sí tenía la nacionalidad portuguesa. A diferencia de José, cuyo padre lamentablemente tuvo que renunciar a ella y por eso el hijo tuvo que esperar a la nueva ley.
Si le hacía ilusión...
Lo más gracioso que diría el niño, sería:
"Quiero que vuelva el emérito papá... Antes con franco esto no pasaba."