Hay padres que parece que educan a sus hijos en un escaparate. Siento la crudeza. Yo entiendo que todos queremos lo mejor para nuestros hijos, que de esto uno no nace sabiendo, pero me dan mucho repelús esos progenitores que viven en una innovación constante, que aplican técnicas con nombres extrañísimos, que llaman permanentemente la atención del resto de padres que, sin mayor trascendencia, nos bebemos una lata de Steinburg tibia mirando el cielo mientras nuestros cachorros se arrastran por el suelo o roban patatas fritas de la mesa
Comentarios
Monesvol, se dice "Qué Monesvol nos perdone", y tampoco hace falta decirlo. Monesvol, el Monstruo de Espaguetti Volador, nos lo perdona todo. Bueno, todo menos ponerle ketchup a los espaguettis, eso no tiene perdón alguno.
Qué tendrá que ver Montessori con todo esto, me pregunto. Y la respuesta es: nada. Probablemente alguna experiencia que este señor ha tenido con alguien que le ha llamado la atención por algo y sus hijos van a un Montessori. Y esta es su pataleta. Anda y vete a decirle lo que sea a quien sea y déjate de monsergas, hombre. Y no confundamos, que no tiene nada que ver lo que cuenta, con Montessori.
El maestro Capdevilla hace una explicación muy buena sobre los padres hipermotivados.
Que caca de articulo. No vale ni como critica.