Islandia nos da una nueva razón para amarlos. Su presidente propuso hace unas semanas prohibir la pizza hawaina. Les hemos preguntado a cocineros y demás fauna gastronómica qué plato o ingrediente ilegalizarían si estuviese en sus manos
#2:
Algunos aquí son más papistas que el papa... "prohibiría todos los alimentos que explotan en la boca, como los guisantes, el maíz, los tomates cherry...", ¡pero si son deliciosos! Me es difícil encontrar una sensación más satisfactoria, más gratificante, que el morder algo y que te estalle en la boca, que se te llene de sabor y de jugos en un momento. Coge una guinda en almíbar, o un bombón, o una trufa, algo que te quepa entero en la boca y MUÉRDELO. Destrózalo entre los dientes y goza de cómo el sabor te inunda a la vez la nariz y la boca. ¡No entiendo cómo nadie puede querer prohibir eso!
"¡Prohibiría la grasa del jamón, odio a quienes dicen que es lo mejor!". Nene, que no sepas apreciar el sabor, no es culpa de nadie. La grasa del jamón, no diré yo que sea lo mejor, pero a mí me pasa al contrario: odio a los "miñiñiñi" que la andan quitando con cara de asco y te miran como a un criminal cuando tú te zampas la loncha con su grasa, que es lo que le da el carácter. Que se la quites a un jamón barato de plástico, pase, lo puedo entender, porque no sabe a nada. Pero que me diga que no la soporta en un CincoJotas, ¡a ti no te gusta el JAMÓN, y punto, vete a comer galletitas integrales, guapo!
"No hay que mezclar el chocolate con menta". (Delapluma tamborilea con los dedos sobre la mesa). Como alguien me toque los Aftereight, vamos a tener más que palabras, ¿eh? El chocolate es delicioso en todas sus formas, y con menta TAMBIÉN. Es delicioso hasta cuando es sólo grasa y no chocolate, como el chocolate blanco. Es delicioso negro y puro, de ese que cuando lo hueles, el aroma te sube al cerebro y tus neuronas chillan como adolescentes enchochadas y se levantan el sostén. Es delicioso con leche, deshecho, con licor, con canela, con miel, y con más chocolate. Si una mezcla no te gusta (reconozco que con frutos ácidos o naranja amarga, no me va), prueba con otra, o pruébalo solo, pero no seas categórico diciendo "no se puede, no hay que, no lo hagas, no lo tomes". El chocolate es demasiado buen amante para limitarse a una sola mezcla, o a no mezclarse. Puede estar con casi todo (con pasta, con caza, con hortalizas, con ostras...), y necesita estar con todo, y ser probado con todo. No te cierres a un sabor, pero menos aún se lo cierres a los demás.
Yo no prohibiría ningún alimento. Pero hay algunos que para mí, no existen. El ketchup, no existe.
Algunos aquí son más papistas que el papa... "prohibiría todos los alimentos que explotan en la boca, como los guisantes, el maíz, los tomates cherry...", ¡pero si son deliciosos! Me es difícil encontrar una sensación más satisfactoria, más gratificante, que el morder algo y que te estalle en la boca, que se te llene de sabor y de jugos en un momento. Coge una guinda en almíbar, o un bombón, o una trufa, algo que te quepa entero en la boca y MUÉRDELO. Destrózalo entre los dientes y goza de cómo el sabor te inunda a la vez la nariz y la boca. ¡No entiendo cómo nadie puede querer prohibir eso!
"¡Prohibiría la grasa del jamón, odio a quienes dicen que es lo mejor!". Nene, que no sepas apreciar el sabor, no es culpa de nadie. La grasa del jamón, no diré yo que sea lo mejor, pero a mí me pasa al contrario: odio a los "miñiñiñi" que la andan quitando con cara de asco y te miran como a un criminal cuando tú te zampas la loncha con su grasa, que es lo que le da el carácter. Que se la quites a un jamón barato de plástico, pase, lo puedo entender, porque no sabe a nada. Pero que me diga que no la soporta en un CincoJotas, ¡a ti no te gusta el JAMÓN, y punto, vete a comer galletitas integrales, guapo!
"No hay que mezclar el chocolate con menta". (Delapluma tamborilea con los dedos sobre la mesa). Como alguien me toque los Aftereight, vamos a tener más que palabras, ¿eh? El chocolate es delicioso en todas sus formas, y con menta TAMBIÉN. Es delicioso hasta cuando es sólo grasa y no chocolate, como el chocolate blanco. Es delicioso negro y puro, de ese que cuando lo hueles, el aroma te sube al cerebro y tus neuronas chillan como adolescentes enchochadas y se levantan el sostén. Es delicioso con leche, deshecho, con licor, con canela, con miel, y con más chocolate. Si una mezcla no te gusta (reconozco que con frutos ácidos o naranja amarga, no me va), prueba con otra, o pruébalo solo, pero no seas categórico diciendo "no se puede, no hay que, no lo hagas, no lo tomes". El chocolate es demasiado buen amante para limitarse a una sola mezcla, o a no mezclarse. Puede estar con casi todo (con pasta, con caza, con hortalizas, con ostras...), y necesita estar con todo, y ser probado con todo. No te cierres a un sabor, pero menos aún se lo cierres a los demás.
Yo no prohibiría ningún alimento. Pero hay algunos que para mí, no existen. El ketchup, no existe.
#5#10 Hace poco salió por aquí un libro de recetas del siglo XIX y a la paella le ponían de todo. Lo que había, en realidad. El talibanismo paellil empezó a finales del siglo pasado.
Poco concretas la verdad, de todas formas ese libro al que haces referencia pudiera estar editado en Madrid con lo que estaríamos en las mismas.
También es cierto que todas las recetas evolucionan con el tiempo. Lo que está claro que la paella valenciana es la que se hace en los restaurantes especializados de Valencia, Alicante o castellón (incluso entre ellas hay diferencias) y no las mamarrachadas que llaman paellas en los restaurantes de la meseta.
#15 Aquí te mando el artículo. Quedó cerrado por ser de medio AEDE. Aparecen testimonios de valencianos de pro describiendo paellas muy alejadas de los estándares actuales:
No, si las abuelas del siglo 18 también echarían lo que les rotara en el arroz, no digo que no.
En cualquier paso la paella valenciana es como la queremos los valencianos y no como una periodista de Madrid decida. Si vas a comer a un restaurante en valencia y te sacan la paella con chorizo puede haber hasta un altercado. Las cosas en Valencia son así y si los periodistas madrileños estiman otra cosa pues que sí, que le echen al arroz lo que estimen conveniente, pero no será el plato al que los valencianos llamamos paella valenciana. Es como si yo digo que el cocido madrileño está bueno con morcillas de Burgos. ¿tengo yo la receta correcta o la receta correcta es la de los miles de cocidos madrileños que se hacen cada día en Madrid?
Lo mejor del artículo es el final. Dos personas sensatas defienden que todo se puede probar, y que ese es el origen de muchos platos. Al primero que mezcló cosas tan dispares como el café y la leche podrían haberle apedreado, pero resulta que acertó.
El kinder bueno, y ese tipo de chocolate grasoso, incluido el chocolate blanco. Conozco a gente que prefiere este chocolate al buen chocolate belga. A la hoguera con ellos!
#4 es porque en España solamente tenemos dos extremos, pica y no pica. En otros países existen distintos picantes con diferentes aromas y "picores" que le dan distintos matices a la comida, y es un placer gastronómico. Aquí lo más parecido a eso que existe es el pimentón De la Vera picante con ese sabor ahumado que tiene, que es una delicia en los arroces y si no se te va la mano para nada enmascara el sabor del plato, lo realza totalmente. Lo demás se limita a picamuchosinsabor o sin picante, y es una pena
Mi tía Carmen echa a la paella guisantes, eso sí que es una aberración. Los sobrinos pensamos que esa anomalía culinaria la adoptó tras vivir en Madrid en los años 50 durante seis meses en una pensión e la calle del pez,, donde hacían la paella- de sta manera todos los martes.
Comentarios
Algunos aquí son más papistas que el papa... "prohibiría todos los alimentos que explotan en la boca, como los guisantes, el maíz, los tomates cherry...", ¡pero si son deliciosos! Me es difícil encontrar una sensación más satisfactoria, más gratificante, que el morder algo y que te estalle en la boca, que se te llene de sabor y de jugos en un momento. Coge una guinda en almíbar, o un bombón, o una trufa, algo que te quepa entero en la boca y MUÉRDELO. Destrózalo entre los dientes y goza de cómo el sabor te inunda a la vez la nariz y la boca. ¡No entiendo cómo nadie puede querer prohibir eso!
"¡Prohibiría la grasa del jamón, odio a quienes dicen que es lo mejor!". Nene, que no sepas apreciar el sabor, no es culpa de nadie. La grasa del jamón, no diré yo que sea lo mejor, pero a mí me pasa al contrario: odio a los "miñiñiñi" que la andan quitando con cara de asco y te miran como a un criminal cuando tú te zampas la loncha con su grasa, que es lo que le da el carácter. Que se la quites a un jamón barato de plástico, pase, lo puedo entender, porque no sabe a nada. Pero que me diga que no la soporta en un CincoJotas, ¡a ti no te gusta el JAMÓN, y punto, vete a comer galletitas integrales, guapo!
"No hay que mezclar el chocolate con menta". (Delapluma tamborilea con los dedos sobre la mesa). Como alguien me toque los Aftereight, vamos a tener más que palabras, ¿eh? El chocolate es delicioso en todas sus formas, y con menta TAMBIÉN. Es delicioso hasta cuando es sólo grasa y no chocolate, como el chocolate blanco. Es delicioso negro y puro, de ese que cuando lo hueles, el aroma te sube al cerebro y tus neuronas chillan como adolescentes enchochadas y se levantan el sostén. Es delicioso con leche, deshecho, con licor, con canela, con miel, y con más chocolate. Si una mezcla no te gusta (reconozco que con frutos ácidos o naranja amarga, no me va), prueba con otra, o pruébalo solo, pero no seas categórico diciendo "no se puede, no hay que, no lo hagas, no lo tomes". El chocolate es demasiado buen amante para limitarse a una sola mezcla, o a no mezclarse. Puede estar con casi todo (con pasta, con caza, con hortalizas, con ostras...), y necesita estar con todo, y ser probado con todo. No te cierres a un sabor, pero menos aún se lo cierres a los demás.
Yo no prohibiría ningún alimento. Pero hay algunos que para mí, no existen. El ketchup, no existe.
#2 Me has hecho la boca agua. ¿Estás con los ensayos del nuevo anuncio de Chocolates Valor?
#2 los que se a quejan del sabor de los alimentos que explotan en la boca es porque no han han probado una buena ...
Ración de peta zetas
#17 #2 perdona que no te había leído. A la hoguera tú también, por decir que te gusta el chocolate blanco
Que mania, una paella es una receta con unos ingredientes específicos, si le añades otras cosas ya no es una paella, es un arroz con lo que sea.
Voy a preparar un pollo en pepitoria y voy a añadirle almejas... Pues no, ya no es un pollo a la pepitoria.
#5 La paella es arroz amarillo, ni mejor ni peor que como se cocina en otros muchos sitios
#8 gatil
No se te ocurra venir por Valencia, no eres bienvenido.
#5 #10 Hace poco salió por aquí un libro de recetas del siglo XIX y a la paella le ponían de todo. Lo que había, en realidad. El talibanismo paellil empezó a finales del siglo pasado.
#12 ℂarpocrates
Poco concretas la verdad, de todas formas ese libro al que haces referencia pudiera estar editado en Madrid con lo que estaríamos en las mismas.
También es cierto que todas las recetas evolucionan con el tiempo. Lo que está claro que la paella valenciana es la que se hace en los restaurantes especializados de Valencia, Alicante o castellón (incluso entre ellas hay diferencias) y no las mamarrachadas que llaman paellas en los restaurantes de la meseta.
#15 Aquí te mando el artículo. Quedó cerrado por ser de medio AEDE. Aparecen testimonios de valencianos de pro describiendo paellas muy alejadas de los estándares actuales:
http://elcomidista.elpais.com/elcomidista/2016/10/13/articulo/1476372723_268242.html
#20 ℂarpocrates
No, si las abuelas del siglo 18 también echarían lo que les rotara en el arroz, no digo que no.
En cualquier paso la paella valenciana es como la queremos los valencianos y no como una periodista de Madrid decida. Si vas a comer a un restaurante en valencia y te sacan la paella con chorizo puede haber hasta un altercado. Las cosas en Valencia son así y si los periodistas madrileños estiman otra cosa pues que sí, que le echen al arroz lo que estimen conveniente, pero no será el plato al que los valencianos llamamos paella valenciana. Es como si yo digo que el cocido madrileño está bueno con morcillas de Burgos. ¿tengo yo la receta correcta o la receta correcta es la de los miles de cocidos madrileños que se hacen cada día en Madrid?
Puestos a prohibir yo prohibiría las comidas y cenas navideñas. Cuantos horrores con pretensiones llega uno a meterse en la boca en esas fechas.
Lo mejor del artículo es el final. Dos personas sensatas defienden que todo se puede probar, y que ese es el origen de muchos platos. Al primero que mezcló cosas tan dispares como el café y la leche podrían haberle apedreado, pero resulta que acertó.
#14 ℂarpocrates
Totalmente cierto, y al que añadió al café con leche las tostads con mantequilla le podrían haber dado un nobel.
El kinder bueno, y ese tipo de chocolate grasoso, incluido el chocolate blanco. Conozco a gente que prefiere este chocolate al buen chocolate belga. A la hoguera con ellos!
No negociamos con terroristas Jaime Oliver.
Yo no soporto el picante. No entiendo qué sentido tiene matar el sabor de un alimento a no ser que esté estropeado (como pasaba originariamente)
#4 Matar las bacterias que hay por el calor
#4 es porque en España solamente tenemos dos extremos, pica y no pica. En otros países existen distintos picantes con diferentes aromas y "picores" que le dan distintos matices a la comida, y es un placer gastronómico. Aquí lo más parecido a eso que existe es el pimentón De la Vera picante con ese sabor ahumado que tiene, que es una delicia en los arroces y si no se te va la mano para nada enmascara el sabor del plato, lo realza totalmente. Lo demás se limita a picamuchosinsabor o sin picante, y es una pena
Yo prohibiría al que quiere prohibir la Nutella: Acepto que no sea sana, pero me encanta.
Mi tía Carmen echa a la paella guisantes, eso sí que es una aberración. Los sobrinos pensamos que esa anomalía culinaria la adoptó tras vivir en Madrid en los años 50 durante seis meses en una pensión e la calle del pez,, donde hacían la paella- de sta manera todos los martes.