De vez en cuando visito a mis dos tías en el pueblo, en su pueblo. Las dos hermanas viven solas e independientes, solteras. Cosas de la vida. La visita es un poco para hacer de sobrino "arreglacosas" y para comprobar que están bien, cuidadas y demás. Una, llamésmole Ana, es un año mayor que Eva (nombre ficticio también), y como hermana mayor se encarga de cuidar de su hermana pequeña. A estas edades es curioso que se sigan manteniendo esas costumbres, pero quién soy yo para opinar sobre eso. El caso no es que haya tenido …