Al grito de “que viene, que viene, ahhhhh”, Jaime Fonseca, un bilbaíno de 54 años ha dicho a su familia que va a necesitar la epidural porque “viene cabezón y del revés”, según ha podido saber la prensa. “Soy un partidario de lo natural y quería sentirlo, ¿sabéis? pero ahora me da miedo y solicito anestesia”, ha declarado desde el sofá, aguantándose la barriga, bastante hinchada, con ambas manos.