
Hay que agradecer a la prensa de derechas que, sin preocuparse demasiado por su credibilidad, nos ha dado estos días la herramienta necesaria para descubrir cuál es el origen de todo mal; lo han hecho usando una sencilla fórmula que se basa sólo en una idea muy simple, no vaya a ser que sus lectores se despisten:
"El socialismo y el sanchismo son el mal, siempre."
Por lo tanto, contar la realidad del último caso de corrupción del PP, que parece que va a ser uno de los más graves de la historia, es tan sencillo como publicar noticias o artículos de opinión con los siguientes titulares:
La Gaceta:
Libertad Digital:
ABC:
Vozpopuli:
Fuente: bsky.app/profile/eljaviparla.bsky.social/post/3lugdp6icwc2w (y los mensajes posteriores)
La pandemia, además de mascarillas, la conciencia de la distancia interpersonal y los reels vergonzantes de famosos en Instagram, hizo objeto de la gran discusión pública un tema fascinante: el reparto de competencias entre el Estado y las comunidades autónomas. Y como cualquier cosa compleja que se hace popular, todo el mundo con un breve vistazo al tema se convirtió en experto. Así, con el cruce de acusaciones competenciales entre Ayuso e Iglesias, las competencias resultaban ser tan sencillas como ir a los artículos 148, 149 y 150 de la Constitución y decir que le correspondían a uno u otro.
Sirva pues este artículo para intentar explicar cómo funciona el tema realmente.
Lo primero de todo es que el modelo territorial español es… raro. No tiene un equivalente unívoco en el derecho comparado. No me voy a meter aquí en si España es o no federal; mi opinión es que el “federalismo” es una escala, no un absoluto. Ni siquiera dos estados tradicionalmente federales como Alemania y EE.UU son comparables, y hay todo un rango entre estos y el centralismo francés, pasando por el regionalismo italiano.
Cuando se le pidió al TC que se pronunciase sobre ello, dijo que ni lo uno ni lo otro: que era un "Estado de las Autonomías" y ea. Y cuando se le preguntó si el "Estado de las Autonomías" era más federal o centralista, se apretó los oídos y dijo "lalalalalala" muy fuerte hasta que ya hemos dejado de preguntarle.
Al lío: las competencias pivotan principalmente sobre tres artículos: el 148 y el 149. Y aquí llega la primera diferenciación:
- El 148 nos dice qué competencias PUEDEN asumir, SI QUIEREN, las Comunidades Autónomas.
- El 149 nos dice qué competencias DEBE asumir, en principio, el Estado.
- Y el 150 nos da tres vías distintas para modificar este reparto a posteriori: leyes marco, leyes de transferencia y leyes de armonización.
Fijémonos en que el 148 tiene un carácter voluntario y el 149 es preceptivo. El 149 tiene, además, en su apartado tercero, la cláusula residual, que viene a decir lo siguiente:
a) Lo que el 149 no diga que es del Estado, se lo pueden quedar las Comunidades Autónomas (aunque no estén en el 148)
b) A su vez, lo que no hayan asumido las Comunidades Autónomas se lo quedará el Estado.
c) El derecho estatal será supletorio del autonómico.
Este juego del 148, 149.1 (y 2), y 149.3 es lo que se llama “sistema de triple lista”.
Hasta aquí bien y sencillo.
Sucede no obstante que no todas las competencias exclusivas del Estado son igualmente completas.
- A veces al Estado le corresponde la competencia exclusiva plena, es decir: no sólo legislar sobre ello las bases, sino legislarlo todo e incluso el desarrollo reglamentario: este es el caso de la Defensa y Fuerzas Armadas (149.1.4), la Administración de Justicia (149.1.5), legislación penal (149.1.6) o la nacionalidad (149.1.2), entre otras.
- Otras veces el Estado tiene una competencia exclusiva limitada, una competencia compartida con las Comunidades Autónomas. Quiere decir que tiene la competencia exlusiva para legislar, por ejemplo, las bases, las normas generales; pero estas pueden ser después desarrolladas legislativamente por las Comunidades Autónomas: las bases del régimen jurídico de las Administraciones públicas (149.1.18), la legislación básica sobre Medio Ambiente (149.1.23), normas básicas sobre el régimen de comunicación social (149.1.27).
De hecho, esta competencia es exclusiva, pero sólo para legislar las bases: implica que el Estado no puede legislar tan en detalle que prive a las Comunidades Autónomas de espacio para desarrollarlo según deseen.
- En otras, el Estado tiene una competencia exclusiva en lo legislativo (no cabe desarrollo vía ley autonómica), pero sí permite la “ejecución” a las Comunidades Autónomas. Este es el caso de la legislación laboral (149.1.7), o el régimen económico de la Seguridad Social (149.1.17).
- Y luego tenemos una rareza, que es la del 149.2, que es la de la cultura: para algunos autores es el único ejemplo de “competencia concurrente”. En este caso, tanto Estado como Comunidades Autónomas ejercen el mismo poder sobre ella, siempre que no se pisen la manguera entre sí.
Espero que sirva para no llevarse a error e interpretar bien la Constitución. Porque el hecho de que una competencia aparezca en el 148 no quiere decir que Murcia en concreto la tenga. O que una competencia aparezca en el 149 tampoco implica que las Comunidades Autónomas no puedan legislar ni desarrollar ni ejecutar el tema. O que el Estado pueda legislar absolutamente todo en ello.
Taloghi'lo.
Todo esto es, por supuesto, mucho más complejo y podría escribir mucho sobre ello. Pero ya he escarmentado de hacer artículos largos y currados con referencias para que venga Fulano_Muchosnúmeros a no leerse nada y comentar alguna parida. Así que cualquier ampliación podemos verla en comentarios.
Llevo toda la tarde leyendo subreddits sobre distintas partes de España y veo mucha gente animando a extranjeros a venirse, diciéndoles que todo bien por aquí, que chill, que es barato para ellos. Que se vive muy bien...
Luego esos mismos españoles se quejan de las condiciones de vida, de que todo está caro y los salarios son bajos.
De verdad, no entiendo como no se dan cuenta que por una parte animar a la gente a venir encarece los precios del alquiler y de todo en general. Que convierte las ciudades en parques para turistas y guiris y luego se quejan de esos efectos y de cómo nos expulsan a nosotros para que ellos con salarios básicos de sus países vengan aquí a expulsarnos.
Si estás en reddit tienes que decirles que esto es una mierda, que hay cosas que van mal, que la gente está arta para que no vengan. En serio, el loro aprendió a decir oferta y demanda y se sacó el título de economía. Tú también puedes.
Habla mal de españa, de tu ciudad, di que hay conflictos. Mirad a los franceses como son gilipollas con otros europeos para que no les encarezcan las cosas, como si intentas hablar francés te cortan rápidamente.
En España hablamos mal el inglés, y si nos cruzamos con guiris no hablamos, no los integramos, que se vayan, que no nos gentrifiquen. Espabilad
Vox dijo hace unos días que pretendía expulsar a más de 8 millones de inmigrantes de España, esto a efectos de los inversores internacionales y especuladores es una presión de venta sobre el mercado de la vivienda. Si 8 millones se van entonces el precio de la vivienda cae.
Esto obliga a los nazis y fascistas a rebajar el nivel, ya que a cada vez que se ponen con sus algaradas nazis recordamos que quieren expulsar a millones de personas, con lo que a efectos de mercado es espantar inversores.
Y con esto jugamos constantemente, prensa internacional, enviar correos a inversores, espantar a la gente. Su fascismo es una presión contra el país. Lo cual llevará a muchos viendo las encuestas a vender sus especulaciones ya que viendo a Vox en el gobierno se producirán cosas parecidas a las que ocurre en EEUU con las deportaciones.
Con esta tensión obligamos a los fascistas a bajar decibelios y si bajan decibelios lo que queda es subir salarios para mantener los precios actuales insostenibles, porque con estos precios y salarios y la amenaza de expulsión de los nazis, tenemos un 40% menos de natalidad en los últimos años, es decir menos compradores de vivienda y consumidores en el futuro.
Con esta cuadratura del círculo solo nos queda ganar a la izquierda, subir salarios, calmar fascistas y espantar inversores y especuladores ante la tensión de que mucha gente se vaya amenazada por los de Vox, ante la tensión de que no hay nuevas generaciones que cubran la demanda o subir salarios recortando beneficios. Triangulando esta demanda y apretando en cada sitio tenemos para mejorar la calidad de vida de la gente.
Hace tan solo un par de semanas, Santiago Abascal amenazó al programa "Malas Lenguas" de RTVE tras una pregunta de la reportera Esther Yáñez. twitter.com/MalasLenguasLa2/status/1938606451703919002
Hoy, esa misma periodista está siendo acosada por la extrema derecha mientras intenta informar desde Torre Pacheco:
twitter.com/riojaberon/status/1945184929232359913
twitter.com/remerikos/status/1945184409612652632
twitter.com/_Juan__A/status/1945193620455190821
twitter.com/SER_Murcia/status/1945185056785371278
Le lanzan agua, la rodean, la hostigan y la obligan a alejarse mientras la persiguen al grito de "zorra", "cerda", "asquerosa", "fuera de aquí"... a coro con "Pedro Sánchez, hijo de puta".
Policía Nacional y Guardia Civil escoltaban a Vito Quiles:
twitter.com/La_SER/status/1945189048437350730
Así, con todo.
Unos señalan.
Otros hacen su parte.
Apenas queda nada de lo que antes se llamaba conciencia de clase obrera. Es más, muy pocos se ven como "obreros", en todo caso "trabajadores". Es lo que somos la gran mayoría, pero tampoco tenemos marcada esa identidad ni nos sentimos parte de una misma clase trabajadora. ¿Por qué ocurre esto?
Hace unos días, en una entrada sobre por qué pagamos impuestos, comentaba sobre el individualismo egoísta difundido en las últimas décadas con las ideas neoliberales, en oposición al concepto de sociedad. Con ese egoísmo algunos defienden no pagar impuestos, ya que se ahorrarían un pico de sus ingresos, pero no entienden cuánto les costaría que no existiese nada de lo que pagamos con ellos.
El individualismo egoísta nos ha impregnado a todos, al menos en parte, aunque no nos demos cuenta. Se han desdibujado ideas que formaban parte del debate público, como sociedad o bien común. Y con ellas se han perdido los conceptos de unidad y clase social.
Sin esos conceptos no podemos tener identidad de clase. Y sin ésta no es posible la lucha de clases. Por eso Thatcher y toda la derecha neoliberal niegan el concepto de sociedad.
El individualista no pelea por su clase, únicamente por sí mismo, por eso se queda solo. No es como las kellys o los reponedores del super, por supuesto. Ni siquiera como los trabajadores de otras categorías en su empresa. Le importa lo suyo. Si otros hacen huelga, le molesta. Si por una vez él quiere huelga, los demás son insolidarios por no defender SUS intereses. No existe la clase porque no entiende lo común, sólo existe el YO, individual y egoísta.
Curiosamente, con otras identidades no hay problema. Nuestro amigo trabaja, pero también es un inversor: tiene 27 acciones del Santander y 400€ en un fondo. El banco le envía cartas explicando lo que conviene a inversores como él. Y lo tiene claro, lo que le viene bien, individualmente, es que bajen los impuestos a los beneficios del capital... aunque no haya un instituto público en 20km a la redonda y tenga que pagar las cuotas "voluntarias" de un concertado para sus hijos.
Quizá nos reconozcamos en alguna de las cosas que menciono. No somos conscientes de hasta que punto es omnipresente ese individualismo egoísta. Y tenemos que unirlo al otro gran éxito de las últimas décadas: todos somos clase media, por lo que tampoco tiene sentido la lucha de clases. Ya sabes, el frutero de la esquina es de clase media e inversor, como Amancio Ortega y como tú, que eres administrativo, pero la funcionaria del DNI es una privilegiada...
Mucha gente que se considera de izquierda piensa así. Y a menudo culpan a otros identitarismos de la falta de conciencia de clase. En especial a identidades feministas o de género, pero sorprendentemente nunca a identidades nacionalistas, liberales o anticomunistas, por ejemplo. Ni a otras, bendecidas por el capitalismo y de las que también podría alegarse que desmovilizan políticamente, como ser gamer, futbolero, trekkie, o cualquier otra cosa que "somos".
Pero es absurdo. Ser feminista no impide sentirse de clase trabajadora, como tampoco ser un gamer. Es más, la llamada izquierda identitaria es de los pocos colectivos que están dispuestos a movilizarse, a diferencia del individualista inversor patriótico, que cuesta horrores sacarle del sofá y prefiere culpar de su salario ridículo al gobierno en lugar de a su empresa, que lleva varios años en record de beneficios por las subidas de precios. Esto puedes verlo en cualquier manifestación pro-derechos laborales o servicios públicos: buena parte de los que están son los mismos que acuden a manifestaciones pro-derechos LGTB+ o feministas. Ellos sí se movilizan.
Quizá por eso la derecha odia tanto a la izquierda identitaria. En esa izquierda hay gente que entiende lo que significa unidad y defensa de lo común, no actúan sólo como individuos egoístas, y por eso son de los pocos a los que aún les queda algo de conciencia de clase.
Uno de los males actual de la prensa es que muchas veces se limitan a replicar las notas de prensa que le llegan sin comprobar lo que dicen. ABC publica un artículo donde asegura que los ataques antisemitas han aumentado un 321% en España, siendo la fuente de información el Observatorio de Antisemitismo. Pero si nos vamos al informe para ver los datos detallados, podemos ver que esos ataque han pasado de ser 60 en 2023 a 193 en 2024, luego el porcentaje de incremento es del 221% (193/60=3,217). Y el incremento desde 2022, donde fueron 34, es del 467% en vez del 527% que se indica en la información. Todo por replicar sin comprobar los porcentajes erróneos.
No es el único medio que ha realizado esta mala práctica, como podemos comprobar en el siguiente artículo de La Razón:
Nota: Este es un artículo introductorio originalmente escrito con la intención de ser publicado en el blog de Desperta Ferro Ediciones, rechazado por lo heterodoxo del tema tratado, chocando con la cronología establecida, la cual considero que debe ser reexaminada, expuestas mis razones de manera breve aquí.
El escudo es el segundo elemento más importante para todo guerrero, tan solo detrás de su arma y sirve como su principal elemento defensivo. Siendo el elemento más representativo del soldado romano, el escudo representa un aspecto en el cual aún no se ha logrado un conocimiento profundo y preciso, y ciertas ideas erróneas siguen presentes hoy día.
Aunque la palabra scvtvm significa escudo, cuando comúnmente usamos este término lo hacemos para hacer referencia exclusivamente al escudo romano curvo empleado por las legiones. El scvtvm es, probablemente, el escudo más fácilmente reconocible en la cultura popular; son grandes, fuertemente curvos, y, aunque pueda parecer un cliché, la evidencia arqueológica indica que el color rojo era el más comúnmente empleado. Aunque dentro de los círculos académicos relacionados con la arqueología militar es usual tener una visión general y aproximadamente correcta sobre cómo era, siguen existiendo algunas lagunas debido a cuestiones que aún no han sido abordadas. Este desconocimiento es más común fuera del ámbito académico, lo cual resulta comprensible. Sin embargo, lejos de detalles específicos en cuanto a su construcción, lo que se abordará a continuación son aspectos generales comúnmente aceptados pero que están basados en ideas arcaicas y obsoletas.
Una de las ideas más fuertemente establecidas respecto al scvtvm se refiere a la cronología y evolución de su forma a lo largo su historia. Esta percepción común se resume en la siguiente transición: pseudo-oval→augústea→rectangular la cual, además, va asociada a un abandono relativamente rápido de la forma anterior en favor de la nueva, así como la vinculación de una de sus características a una de estas tipologías; sin embargo, esto no es cierto, o por lo menos, no de forma tan simple.
Fig. 1 Altar de Domicio Enobarbo (final s. II a.C) Fig. 2 Jinete parto con scvtvm (s. I-II d.C) Fig. 3 Legionarios en la Columna Trajana (s. II d.C)
Establecer el inicio exacto de este tipo de escudo es una tarea especulativa. Una posibilidad es que podría haberse comenzado a usar alrededor de finales del s. VI a.C tras la reforma establecida por Servio Tulio, quien introdujo cambios profundos en materia militar, aunque una fecha más reciente parece más plausible, ya que también podría deberse a otra serie de reformas introducidas, quizá, por Marco Furio Camilo entorno a la época del saqueo de Roma por los galos de Breno a inicios del s. IV a.C. Las primeras representaciones claras de este tipo de escudo pueden rastrearse en el monumento a Emilio Paulo, en el 167 a.C y en altar de Domicio Enobarbo alrededor del 122-115 a.C, siendo el escudo de Fayum (Egipto, s. III-I a.C) el ejemplar arqueológico que confirma la existencia de esta tipología, el cual se encuentra en un estado de conservación relativamente aceptable. El historiador griego Polibio también habló sobre él en sus Historias, escritas en el siglo II a.C.
Existen 3 grandes rasgos que caracterizan a este tipo de escudo: su gran tamaño, de aproximadamente 4 pies de altura, mayor que lo que aparentemente se empleó en épocas posteriores; el uso de la spina de madera, elemento de tradición celta que sirve para cubrir el hueco dejado en el centro del escudo, el cual tiene el asa, y para otorgarle una mayor rigidez vertical; y su geometría, la cual podría definirse como un pseudo óvalo o un rectángulo de lados convexos. Son estos últimos 2 elementos los puntos centrales de la cuestión, como iremos viendo.
El fin del empleo de este escudo se ha establecido comúnmente entorno al cambio de era, aproximadamente en las últimas décadas del s. I a.C, o en las primeras del s. I d.C, sin embargo, podemos rastrearlo en el arte en el relieve de la Cancelleria, fechado en torno al 81-96 d.C, y una posible aparición en la métopa nº 33 del Tropaeum Traiani, en el 109 d.C, así como en alguna otra aparición a lo largo del s. I d.C. En Masada aparecieron unos posibles restos arqueológicos, datados en torno al 73-74 d.C. Se halló un gran fragmento de cuero o piel perteneciente al recubrimiento del escudo que iba pegado sobre el núcleo de contrachapado, el cual tiene esta geometría pseudo-oval o de rectángulo de lados cóncavos que parece muy similar a la vista en el propio escudo de Fayum, siglos anterior.
Relieve de Puteoli. 95-102 d.C
Tras esto, y siguiendo con la cronología clásica, la forma augústea se suele atribuir al arco de Orange, fechado en el 10-27 d.C, aunque es un poco dificil de visualizar debido a la erosión; la urna cineraria de Agnani, a mitad del s. I d.C, da una imagen mucho más clara de él. Su geometría es igual que la del escudo pseudo-oval republicano, pero con los lados superior e inferior recortados, mostrando un borde recto. Otra forma de verlo, más simple, es visualizar el clásico escudo rectangular, pero en lugar de bordes verticales rectos posee lados ligeramente curvos. Se rastrea su uso hasta el año 95-102 d.C en Puteoli. No existen restos físicos de esta tipología, salvo fragmentos de bordes de aleación de cobre que dan testimonio de la curvatura de sus lados verticales. La visión clásica dice que este escudo perdió la clásica spina de madera presente en la tipología anterior en favor del umbo metálico de base cuadrada o rectangular, pero la realidad es otra. Abordaré esto más adelante.
Llegamos al scvtvm clásico, el rectangular, tan ampliamente representado en películas y series. Atendiendo de nuevo a la visión clásica aceptada, su uso es posterior a Augusto, apareciendo tras las décadas iniciales del siglo I d.C. La primera vez que este escudo aparece en el arte romano es en el Mausoleo de Plancus, fechado entre el 20-10 a.C; esto establece su aparición varias décadas antes a la forma augústea. Sin lugar a dudas, el scvtvm rectangular está ampliamente representado en el arte romano a lo largo, principalmente, de los siglos I-II d.C, con su máximo exponente en la Columna Trajana, erigida a inicios del s. II d.C. Se hallaron restos arqueológicos de esta forma datados alrededor del 256 d.C en Dura Europos, con el mítico escudo rojo, el nº 15, de los 24 hallados. Una de las ultimas representaciones en contexto militar viene del relieve del legionario de Alba Iulia, entre los siglos II-III d.C, ilustrada más arriba, aunque el mosaico de la Galleria Borghese del 320-330 d.C muestra varios gladiadores de tipo murmillo con sus respectivos escudos rectangulares.
Un aspecto no abordado hasta ahora es el empleo de la spina. La visión clásica sugiere que su uso decayó con la forma republicana pseudo-oval, y que, incluso al final del ciclo de este escudo, desapareció, pero lo más probable es que, aunque en al final del cambio de era su uso no fuera tan amplio, lo cierto es que sobrevivió durante el siglo I d.C en las formas de escudo augústea y rectangular. Los argumentos comunes para ello se centran en un ahorro de peso y reducción de costes, pero esto es difícilmente sostenible. Por un lado mi propio trabajo como artesano reproduciendo la spina del escudo de Fayum (en álamo y no abedul como el original, pero ligeramente más gruesa) arrojan 600gr de peso, mientras que umbos rectangulares de pequeño tamaño, como el de Brigantium, realizados en chapa de 2mm indican un peso de alrededor de 400gr, y ejemplares de mayor tamaño con el mismo espesor alrededor de 725gr, por lo tanto parece que el ahorro de peso solo podría serlo en ciertos escenarios, pero su incremento es también posible, y probablemente, más frecuente. El coste representa un asunto más difícil de confirmar, pero el metal era algo realmente caro en la antigüedad, por lo que el coste en material y su coste laboral para transformar la materia prima en el producto terminado, parecen bastante dispares entre ambas piezas.
El empleo de la spina puede rastrearse durante el s. I a.C - I d.C en las 3 tipologías. El arco de Claudio, del 51-52 d.C, muestra escudos pseudo-ovales con spina, asi como un friso de armas proveniente de Augusta Taurinorum, de mitad del s. I d.C y posiblemente el relieve de la Cancelleria, del 81-96 d.C. En cuanto a la forma augústea, la urna de Agnani, de mitad del s. I d.C es una representación preciosa de ello y muestra una gran cantidad de estos escudos. El escudo rectangular la muestra en el mausoleo de Plancus, entre el 20-10 a.C, mencionado anteriormente. También está presente en un relieve proveniente de Glanum, fechado en el s. I d.C,
Mención especial a un friso de armas proveniente de Saint-Bertrand-de-Comminges, aparentemente fechado en los siglos II-III d.C, aunque podría ser anterior. En este friso aparecen tanto la forma pseudo-oval como la augústea, ambas con spina.
En definitiva, las ideas clásicas deben ser reevaluadas y la visión en cuanto a la cronología de este escudo debe cambiar. El empleo de la forma augústea y rectangular es anterior a lo comúnmente establecido; la forma rectangular por el testimonio que nos deja el mausoleo de Plancus, y la forma augústea por ser más cercana geométrica y conceptual a la forma pseudo-oval republicana. Posiblemente los 3 tipos de escudo coexistieran durante periodos largos de tiempo, especialmente las formas augústea y rectangular y esta última aún pudiera estar presente en los campos de batalla del s. IV d.C. Del mismo modo, la spina de madera sigue vigente durante el primer siglo d.C, aunque en menor medida, en estas formas a las que tradicionalmente no se la ha atribuido.
Fig. 5 Urna cineraria de Anagni, Italia, primera mitad del s. I d.C.
CREDITOS:
Fig. 1: Jastrow . "Altar Domitius Ahenobarbus Louvre n3bis" en Wikimedia Commons. Imagen de dominio público.
Fig. 2: Sailko. “Statua equestre di cavaliere orientale partico, I-II secolo dc (coll. santarelli) 01" en Wikimedia Commons, bajo licencia CC BY 3.0. Disponible en: creativecommons.org/licenses/by/3.0/
Fig. 3: Benjamín Núñez González. "Detalles, Columna Trajana, Roma, 2017 01" en Wikimedia Commons bajo CC BY 4.0. Disponible en: creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/
Fig. 4: “The Puteoli Marble Block”. Número de objeto MS4916A. Cortesía del Penn Museum.
Fig 5: “Marble cinerary urn”. Met Museum. Imagen de dominio público.
Hace años vi un documental sobre la liberación de los campos de exterminio nazis. Toda la película estaba hecha de fragmentos grabados por los soldados aliados que llegaron a cada campo. En uno de ellos, ubicado en plena Alemania junto a una ciudad, los soldados decidieron obligar a las autoridades locales y la población alemana a visitar el campo. Tanto el alcalde y los dignatarios civiles nazis como los ciudadanos, afirmaron no saber absolutamente nada de lo que acontecía allí. Pero sus rostros no mentían. Cuando salieron de contemplar las montañas de cadáveres esqueléticos y las cámaras de gas, el alcalde y su séquito no mostraron emoción alguna, ni siquiera sorpresa. La mayoría de ciudadanos alemanes, en cambio, salían llorando. Era evidente que la población local, al menos en general, no sabía de las atrocidades que se cometían tras aquellos muros, mientras que los líderes locales del partido nazi conocían y aprobaban aquellos crímenes contra la humanidad.
Hoy twitter está inundado con vídeos de civiles palestinos, la mayoría niños, agonizando en Gaza. Son los mismos vídeos que podéis ver en los grandes medios, pero en cantidad mucho mayor. Como en menéame no puede publicarse contenido explícito, os los describo: rostros esqueléticos, brazos como palillos, piernas que parecen a punto de quebrarse, mirada perdida, boca abierta intentando respirar a duras penas y barriga totalmente hundida o hinchada como un globo. Hay bebés, críos de 7 u 8 años y también personas mayores. En las últimas 48 horas han muerto de hambre 23 personas, y miles sufren desnutrición. Las balas israelíes han matado, durante el último día, a otros 116 palestinos, muchos de ellos en las trampas mortales de los puntos de recogida de alimentos, que los soldados israelíes usan para concentrar población y ametrallarla más fácilmente. Mientras tanto, los aviones reducen a escombros los pocos edificios que quedan en pie.
El campo de exterminio de Gaza está más activo que nunca, con todas sus máquinas de matar a pleno rendimiento. El bloqueo alimentario, los francotiradores y los aviones de guerra. El objetivo se resume en una frase que Hitler repetía ocasionalmente en sus discursos: "la exterminación de la raza judía (árabe) de Europa (Palestina)". Masacrar al mayor número posible y deportar al resto. Llenar sus tierras de pelirrojos nacidos en Londres, rubios polacos, bronceados argentinos o morenos italianos. El mero hecho de que profesen la religión judía les da derecho a quitar su casa a quienes llevan cientos de años viviendo en Palestina. Porque son el pueblo elegido. Porque no sólo sus vidas, sino cualquier capricho suyo, valen más que las vidas de todas las cucarachas árabes.
Ahora mismo están con Gaza, pero pronto le tocará a Cisjordania. Los asentamientos ilegales crecen sin cesar, y las juventudes hitlerianas de los colonos atacan diariamente, convenientemente protegidos por soldados israelíes, pueblos árabes para forzar la huida de sus habitantes. Queman sus cultivos, disparan contra sus casas (porque van armados con rifles, no les basta la protección de los soldados) y si algún palestino responde lanzando una piedra es liquidado al instante. Smotrich y Ben Gvir, ministros de Netanyahu, no cesan de declarar que hay que "promover la migración voluntaria" de los palestinos de Gaza y Cisjordania para llenarlas de colonos. Aparte, por supuesto, de justificar la tortura en las cárceles israelíes cuando se filtran imágenes sobre violaciones y agresiones sádicas contra presos palestinos www.democracynow.org/es/2024/8/1/israel_gaza_palestinian_prisoners_tor
Y cuando Palestina esté despoblada de sus habitantes autóctonos, ampliar el lebensraum. De hecho, Netanyahu y sus ministros ya están en ello. Han ocupado por la fuerza amplias zonas del sur de Siria, en las provincias de Daraa y Quneitra. Han armado a una milicia drusa para limpiar de árabes Sweida y anexionársela. Ocupar el sur del Líbano hasta el Litani también está sobre la mesa. Hay que construir el Gran Israel mientras Trump esté en la Casa Blanca.
Pese a tanta similitud, hay una diferencia notable entre los crímenes de Hitler y Netanyahu. En 1943 no había redes sociales, y la población mundial podía alegar desconocimiento sobre los crímenes nazis, que Hitler intentaba ocultar mandando a la Cruz Roja a visitar campos de concentración modelo, donde se fingía un trato "digno" a los internos. Por el contrario, hoy estamos viendo el genocidio (término perfecto para describir la masacre sistemática y el proyecto de deportación de 2 millones de gazatíes, 60.000 de ellos asesinados en el último año y medio) en directo y en toda su crudeza.
Y nadie, empezando por los reyezuelos y caciques que tiranizan los países árabes, hace nada por evitarlo (con la honrosa excepción de Yemen, que desde su humilde posición ha logrado forzar el cierre del puerto de Eilat, uno de los principales puertos comerciales de Israel). No hacen nada a pesar de que Netanyahu es muchísimo más débil que Hitler. A pesar de que su dependencia de EEUU es total (sin cargamentos de armas norteamericanas no duraría una semana), y Trump no se metería en una guerra a gran escala para protegerlo, máxime si la condición que se pone para no declarar la guerra a Israel es, simplemente, que retire el asedio a Gaza y abandone la franja permitiendo la entrada libre de ayuda humanitaria. A pesar de que Irán ha demostrado que un solo país puede golpear con sus misiles las principales instalaciones militares y el centro de las ciudades israelíes causando enormes daños.
¿El mundo es más pusilánime, más inhumano y más mezquino que hace un siglo? No sabría decirlo. Lo que tengo claro es que la creación de una coalición internacional para parar Israel es un imperativo moral y humanitario. No haría falta ni pegar un tiro. El mero ultimátum a Netanyahu, si es serio, le haría desistir del genocidio. Pero para ello hace falta que varios países se atrevan a anteponer la dignidad humana a sus intereses egoístas. Haría falta lo que las tribus sirias hicieron la semana pasada cuando las milicias drusas armadas por Netanyahu iniciaron una limpieza étnica contra los árabes de Sweida, con el presidente sirio tolerando semejante atrocidad, paralizado y aterrorizado tras el bombardeo de Damasco por Israel para exigirle que dejase hacer a su proxy druso. Todas las tribus, desde Deir Ezzor a Idlib, se unieron y marcharon sobre Sweida, y combatieron con las armas a los drusos proisraelíes. Eso, al menos por el momento, detuvo las masacres de árabes y forzó un alto el fuego. Porque contra Israel hay dos opciones: quedarte quieto mientras destroza a tu vecino, esperando a que te toque el turno...o unirte a él y plantarle cara.
La humanidad nos exige tomar las armas contra el Hitler del presente.
menéame