Hace poco vi la última temporada de la serie de Movistar “Mira lo que has hecho”, que se estrenó hace unos meses. Una serie creada y dirigida por Berto Romero.
La serie es muy divertida y tiene momentos memorables. Sin embargo el último capítulo que cierra la serie me dejó un regusto amargo. Me pareció que había un trasfondo propagandístico disfrazado de crítica política.
La trama de esta última temporada gira en torno a la intolerancia de sectores de la sociedad hacia el humor en la ficción televisiva y el sensacionalismo de los medios de comunicación para sacar algo de contexto, demonizarlo e incluso judicializarlo.
Parecería un crítica política hacia casos como el de los titiriteros, perseguidos y encarcelados por una ficción teatral o por tuiteros, raperos y músicos, perseguidos y condenados por ácidas críticas políticas o chistes sobre los intocables. Pero no es así, se queda en la superficie, incluso desvía el verdadero debate de fondo.
La escena de la discordia
La escena en la que culmina toda la trama describe la última parada del humorista en su periplo judicial y mediático debido a un chiste que hizo su personaje (representado por sí mismo) en una ficción televisiva. En esta escena, él acude invitado a un plató de televisión de tertulia, en hora de máxima audiencia, para intentar explicar a la sociedad el por qué de todo el absurdo y hablar sobre sus intenciones como creador de ficción. Pero pronto se ve rodeado de cuatro tertulianos a los que se suma la presentadora, que sólo quieren carnaza para aumentar el audímetro y seguir llevando el asunto al extremo y terminar de destrozar al humorista.
Pues bien, esos tertulianos responden a estereotipos de lo peor de cada casta política y periodística, algunos prácticamente caricaturas de personajes reales. Tenemos a un político cocainómano, a una periodista de algún tabloide o de revista de corazón barata, etc. Y a un lado tenemos a un tipo que parece que va de progre, asumimos que del espectro de la izquierda, y que en todo momento habla gritando por encima de los demás y termina cada frase con alguna consigna, a modo de crítica social. Todos ellos por supuesto muy maleducados y estúpidos, él incluido. En un momento dado, una de las tertulianas, en un primer plano, le recrimina “¿Tú pides coherencia? ¿Tú, que cuando eras diputado de Podemos tenías una trabajadora de la limpieza que cobraba en negro?”(sic).
Al final el protagonista se marcha del plató andando lentamente mientras el grupo sigue despotricando y peleándose entre ellos a ver quién grita más alto.
Pues bien, en esta parodia y a lo largo de toda la escena no se dice de ningún personaje su afiliación política, excepto la de este personaje, que se hace bien explícita en un primer plano.
La asociación es clara: todos son iguales, y los de Podemos van de progres soltando consignas pero en realidad son unos ladrones y unos maleducados y descerebrados sin educación ni cultura, como todos. Y por si no quedara claro a quién nos referimos, vamos a subrayarlo diciendo bien claro su nombre. A los demás no nos referiremos directamente no vaya a ser que nos demanden. Ah no, que son los que nos pagan...
En fin, para mí, una decepción que sólo engrasa más la máquina del fango. Con Podemos parece que vale todo. Precisamente la gente de Podemos que acude a tertulias de televisión son la excepción a la norma, son de los pocos que hablan con educación y sin interrumpir y de los pocos que responden a un movimiento que está detrás que es real y no de cartón piedra como los demás. Y no mencionar ya el ataque constante por tierra, mar y aire difamando que son unos corruptos sin ninguna prueba.
Acoso y derribo. Campaña política y mediática hasta en la sopa. ¿También en la serie de Berto? Sí, también.
Por lo demás, una serie muy entretenida y disfrutable.
Comentarios
#0 Si hubiera criticado al PP, a Vox o a Cs, ¿habrías escrito un artículo en Menéame para denunciarlo?
Por cierto, la serie contiene perlitas mucho más jugosas. Lo del pediatra enano y el aparcamiento para discapacitados. Lo del hermano, que es funcionario "porque no va a valer para otra cosa". Lo de la mujer de Berto con la píldora del día después. Lo del primo que pasa de los chiquillos, y es el que tiene los niños más normales...
Pero vamos, que precisamente la serie está denunciando lo que tú estás haciendo ahora mismo. Estamos en la era de la cancelación, y nunca falta gente sin talento tocando los cojones a gente con talento. Berto simplemente lo cuenta, pese a que "no tiene ni puta gracia".
#1 Creo que confundes la cultura de la cancelación con la crítica razonable. Estoy seguro de que se podría desglosar y analizar cada capítulo, cada gag y cada pieza de la historia desde cientos de puntos de vista, pero yo no trato de denostar la serie al completo, me centro en la crítica de la postura política de esta escena.
Que básicamente es la difamación explícita a un partido político disfrazada de equidistancia, de un “tenemos crítica para todos”. Una crítica no fundamentada en la realidad y que se suma a la campaña por parte de los medios para asentar un cierto relato sobre Podemos.
#2 Claro, claro. Con otro partido estaría justificado, ¿pero contra Podemos? Jamás.
Por cierto, lo de que la crítica a Podemos no está fundamentada es una opinión bastante poco fundamentada. Vamos, lo de pagar en negro al asistente yo creo que es una referencia que todos pueden pillar. No hace falta cabalgar contradicción alguna.
#3 La crítica va sobre poner al mismo nivel graves delitos de corrupción institucional y sistémica que afectan al país y a miles de personas con casos de personas particulares, sin entonces responsabilidad política, (te recuerdo que esta campaña empezó ya antes incluso de las candidaturas) en un bombardeo mediático que busca equipararlos al mismo nivel e instalar una idea negativa de ellos en la sociedad. Y desde luego les ha funcionado. No se necesita ser podemita para ver esto.
#4 Hombre, tampoco te erijas como representante de los no-podemitas, tú mismo podrías estar viéndolo desde una óptica condicionada por el relato y los marcos cognitivos que te llegan desde tu bando.
Es más, yo creo que el gran maestro del relato es precisamente Podemos, y si estoy en lo cierto, los más susceptibles de estar condicionados por un relato son los propios podemitas.
Y para muestra un botón. Acuérdate de quién ganó la "guerra de relatos" que hubo antes de las elecciones entre dos maestros como el PSOE y Podemos. Cómo consiguió sacarse un silloncito para él y otro para su señora. Bueno, y con lo de Galapagar ya directamente se sacó la chorra con sus votantes. Puto crack, cómo coló el relato del "proyecto de vida".
#5 Está claro que hay una lucha (desigual, por cierto) por el relato y bien hacemos tú y yo en decirlo cuando relato y realidad difieren flagrantemente.
#5 No estas en lo cierto.
Que este debate exista, prueba que UP no domina en absoluto el relato.
Que no tengan medios, ni "amigos" en ningun gran medio de comunicación, deberia darte otra pista. El PP, de la mano de Soraya, cambió a todos los directores de periodico que quiso a voluntad, y sin esconderse casi.
El Psoe y el grupo Prisa, ejem...
Que tiene Up? La tuerka?
AMOSNOMEJODAS... lo mismito
En un pais con una población no aborregada, el Psoe primero, y el PP poco despues hubieran sido relegados al olvido. Y los dirigentes en la carcel. No me hagas sacar la lista de casos de esos 2 anda.
¿Te preocupa lo que puedan hacer los nuevos mas que lo que YA han hecho los anteriores?
Enhorabuena, la sociedad es por y para ti, eres idiota
Hostia eso nunca se ha hecho en el cine o la comedia española sobre la derecha. Es indignante.
#7 Entiendo la perplejidad deMcLovin estamos tan acostumbrados a ver críticas a los gobiernos de derechas ya ni nos damos cuenta en la mayoría de casos y cuando nos damos cuenta ni nos inmutamos, es lo normal, pero si hacen una crítica a un gobierno de izquierdas nos parece algo muy raro causándonos perplejidad y suficiente asombro como para luego escribir mensajes como el de este artículo.
Dar caña a los poderosos es lo normal.
Poderoso es es que está en el Poder, ¿no?
Pues toca darle hostias a Podemos, que para eso está en el poder.
A ver cuándo dejamos esa mentalidad de creer que se está en la oposición cuando ya se ha llegado al Gobierno.
#8 No es una cuestión de la crítica al poderoso, es cuestión de difamación. La primera es deseable, la segunda no.
#0 No te he visto criticar el anuncio de Correos que con dinero público directamente hace propaganda política contra VOX.
#9 que los VOXeros se den por ofendidos con eso, solo le da la razón a los que dicen que no saben mas que envolverse en la bandera...
¿Será que tienen razón?
Siento mucho que una serie de ficción haya herido tus sentimientos. Pero por suerte has elegido el bando de los buenos, por eso casi nunca te va a pasar eso.